El cambio horario del Granada-Athletic cuenta con ventajas y desventajas

El equipo se ejercitó ayer en la Ciudad Deportiva y lo hará este mismo viernes tarde en el estadio, siempre a puerta cerrada porque todavía no se ha levantado la restricción en la sesiones a los medios de comunicación, ni siquiera en las alejadas de los partidos. El entrenador, Diego Martínez, aplazó su comparecencia habitual anterior a los encuentros a esta mañana, en la que ya hará balance de estas semanas de trabajo precedentes y podrá trasladar, en primera persona, los pros y los contras del retraso en el debut liguero, entre otros muchos asuntos.

Dentro de los aspectos positivos está el más evidente. Con una franja más para que la plantilla se ejercite, la puesta a punto mejorará con la finalidad de afrontar con algo más de garantías el duelo contra los vascos. En especial, la de los que se han incorporado más recientemente a la dinámica, como el delantero Jorge Molina, que estuvo confinado tras dar positivo en las pruebas de Covid-19 y no había estado con los demás, y el extremo Kenedy, después de que se anunciara su fichaje el pasado martes, fecha en la que ya apareció con el resto de compañeros, superadas todas las pruebas médicas.

Las 24 horas de más que han surgido por el retoque fruto de la guerra entre Federación y Liga las aprovechan otros que a su vez buscan su mejor estado físico por su aparición tardía en la pretemporada, casos de los venezolanos Machís y Yangel Herrera o el galo Maxime Gonalons. También permite una integración con normalidad de los portugueses Rui Silva y Domingos Duarte, que han estado con su selección y que apenas iban a tener tiempo para integrarse bajo la previsión inicial.

En lo negativo, la otra cara de la moneda. Menos tiempo para recuperarse del esfuerzo que suponga la pugna con los bilbaínos con vistas a encarar con vigor el desplazamiento intersemanal a los Balcanes, en la que por ahora es la cita más trascendente del ejercicio que va a empezar, con todo lo que supone. Pese a ello, es poco probable que el técnico gallego se guarde futbolistas con los 'leones' pues cuenta con cierto margen hasta el siguiente desafío. Otra cosa será el domingo siguiente, en la jornada dos, en la que el Granada se mide al Alavés. Las 'rotaciones' aparecerán sin duda.

Otro detalle a considerar es la temperatura, que será más alta que si se hubiera disputado el viernes a las 21 horas. La previsión para el sábado es que haya máximas de 34 grados, aunque puede estar nublado. Esto propiciaría que siga habiendo pausas para la hidratación, una interrupción a la que Diego Martínez suele sacarle jugo para hacer retoques tácticos. También es habitual la imagen de las toallas húmedas sobre los hombros de los futbolistas que contribuyen al enfriamiento durante esos minutos de reposo que caen a mitad de cada acto del encuentro.

Teniendo en cuenta sus patrones de conducta, el 'chamán' seguramente apostará por la base de jugadores que conforman el esqueleto de la escuadra que tan buenos resultados dejó la campaña pasada. Pese a las polémicas sobre una posible salida, Rui Silva estará bajo palos siempre que no medie ninguna indisposición por parte del luso y el técnico le vea con el grado de compromiso habitual. En la defensa aparecen como referentes Víctor Díaz, Domingos Duarte y Carlos Neva, con más opciones de cerrar el cuarteto para el recién renovado Germán Sánchez.

El centro del campo, ahora más nutrido con tres integrantes dentro del nuevo sistema de juego, parece la línea más abierta. Tanto Ángel Montoro como Yangel Herrera parecen llamados a la titularidad, ambos como volantes. Para el pivote habría alguna incógnita entre uno de los fichajes, Luis Milla, y un veterano, Gonalons, uno de los cuatro integrantes que dio positivo en los test del coronavirus, cuando aún estaba en Francia, y que no ha podido estar al mismo ritmo que la mayoría.

En ataque, irrumpen como fijos dos elementos de perfil ofensivo: Roberto Soldado, como delantero centro, y Antonio Puertas, en uno de los extremos. En el último ensayo, frente al Betis, Diego Martínez se decantó por Fede Vico en la derecha. Entre el cordobés y Machís estará el que complete el trío de vanguardia, con los jóvenes Soro y Antoñín como teóricos revulsivos.