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Fran Rodríguez
Granada
Domingo, 27 de septiembre 2020, 01:13
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El Atlético vuelve a hablar el idioma del gol con acento sudamericano y eso, salvo rara excepción, siempre trajo éxitos. Tras Forlán, Agüero y Falcao, los colchoneros apuestan su ataque a la garra charrúa. Luis Suárez es, en un mercado tan tedioso, el gran fichaje del verano. Rebotado por cómo se dio su salida del Barcelona, el uruguayo tiene ante sí el reto de demostrar a los culés que podía seguir liderando un gran proyecto en LaLiga y Europa. Los de Simeone carecieron el año pasado de un goleador y también de ambición en Lisboa, cuando partían como uno de los favoritos a conquistar la esquiva 'Orejona'. Puede ser la solución Luis Suárez, reencontrado el apetito en esta mudanza.
El 'pistolero' cae en un equipo del que se espera más. Lo primero, la explosión de los fichajes del pasado verano. Los laterales dejaron buenas sensaciones, si bien Lodi fue algo más intermitente. En la derecha estuvo mucho mejor Trippier. Sí se asentó pronto Felipe, un central que hizo a los atléticos olvidar pronto a Diego Godín. Sensacional fichaje el zaguero brasileño. A su lado siguen alternando Giménez y un sólido Savic. Sobra decir quién ocupa la meta. El mejor del mundo: Jan Oblak.
La gran duda ahora en el Wanda gira en torno a Thomas Partey. Está en el camino correcto para ser uno de los grandes dominadores de LaLiga, pero no le faltan novias y su marcha dejaría herido el centro. Ahí, Koke y Saúl siguen siendo el motor, pero tienen que alejar esa sensación de estancamiento que les rodea. Dos pasos adelante se esperan de Marcos Llorente. Su papel es un misterio. Llegó para batallar con Thomas, pero ha brillado jugando como extremo, mediapunta y hasta de nueve. Debe ser titular en este Atleti, ya que permite al técnico argentino plantear una gran carpeta de sistemas y dibujos.
Los extremos cada vez participan menos en este Atlético, entre otras cosas por la profundidad de sus laterales. Cuanto más participan los Llorente o Correa, menos lo hacen los Vitolo y Carrasco. Eso sí, aportan frescura y dinamismo en las segundas partes. Arriba, Luis Suárez debe fraguar amistad con otro '10': Joao Félix. Si bien lleva el '7', el portugués es un jugador total y la clave. La pareja entre el luso y el uruguayo resulta muy ilusionante. Así las cosas, los Felipe, Llorente, Saúl y Joao tienen todo un ciclo atlético por delante, el tiempo les concede esperanza. No tiene tanto Simeone, de quien se viene anunciando su 'fin de ciclo' desde hace muchos años. Piezas nuevas pero poca reinvención. Todo lo justificaría la consecución de algún título. Y con Suárez no les faltará hambre ni colmillos.
Diego Pablo Simeone
El argentino sigue siendo el líder del equipo. Así lo dice su influencia en sus chicos y su gran nómina. No obstante, tiene una plantilla para ganar y a todos, incluso los ídolos, se les agota el crédito y el tiempo.
4-4-2
El gran reto de Simeone es, sin tocar demasiado su dibujo, encontrar el mejor sitio para que el fútbol de Joao Félix fluya cada domingo. Marcos Llorente le posibilita hacer un rombo en medio o jugar en 4-3-3.
Luis Suárez
Es el gran fichaje de lo que va de mercado. El uruguayo está ante una temporada de reivindicación, para demostrar que no está tan lejos de esa versión en la que acumuló botas de oro. Uno de los mejores '9' de la década.
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