Un actor secundario del ascenso con Diego amenaza en Burgos

Dani Ojeda firmó por el Granada cedido por el Leganés de Primera división durante el mercado de invierno de 2019. Venía de jugar cinco partidos en la máxima categoría, dos de ellos como titular, pero sin apenas incidencia y quedándose fuera de las convocatorias de Mauricio Pellegrino en la mayoría de jornadas. Diego Martínez le encontró su rol, como también hizo con otro refuerzo de enero como Bernardo Cruz en aquel equipo en el que todos los futbolistas eran importantes y aportaban algo. Ojeda jugó 17 partidos de los que fue titular en diez, marcando un gol en la goleada a domicilio al Rayo Majadahonda en marzo.

Hombre de banda pero con gol, Dani Ojeda sentó a Antonio Puertas incluso en varios partidos pese a que el almeriense acabara aquella temporada como máximo goleador del equipo con diez tantos. Sin embargo, ya en el tramo definitivo de campaña, el canario se quedó sin minutos en la visita al Albacete o en el derbi con el Cádiz que pudo significar el ascenso en Los Cármenes, aunque sí peleó unos días después en los últimos minutos de Palma de Mallorca. Nada que impidiera que celebrase el ascenso con la misma euforia que el resto.

Al verano siguiente, ni el Granada trató de quedarse con Ojeda ni el Leganés lo quiso. Cerradas las puertas de Primera, el canario volvió a salir cedido para recalar en el Albacete de Segunda, con el que logró la mejor marca goleadora de su carrera, con ocho tantos, para liderar su permanencia. El Leganés sí lo retuvo tras su descenso posterior, con José Luis Martí como entrenador, pero tampoco con él caló y en invierno acordó la rescisión de su contrato para irse al Alcorcón. De ahí saltó a la Ponferradina, con la que marcó doce dianas en dos temporadas –ninguna de ellas al Granada pese a visitar Los Cármenes en 2023–, ganándose el fichaje por el Burgos.

Ojeda se hizo un futbolista importante también en El Plantío, titular en 26 de los 40 partidos la temporada pasada, aunque no lograra más que tres goles, pero aún pretende más regularidad. El extremo jugó de inicio en las dos primeras jornadas de la presente campaña, pero luego tuvo tres suplencias de las que se desquitó en Riazor. La lesión de Curro Sánchez le resta competencia para el reencuentro con el Granada.