Vecinos del Zaidín denuncian molestias por el mercadillo desde hace un año
Los afectados piden control policial y más orden ya que aseguran que los puestos ocupan el parque infantil y dejan residuos en la zona
Aceras ocupadas de vehículos y terrenos cubiertos de papeles, cajas de plástico o restos de ropa. Esta es la imagen con la que conviven los ... vecinos del Zaidín por el mercadillo que se ubica en el barrio cada sábado. Los afectados denuncian que los puestos ocupan de forma desordenada el 60% del espacio, una situación que provoca que las zonas infantiles estén ocupadas y, por lo tanto, inservibles por los progenitores y sus hijos.
Aseguran que los coches invaden las aceras y que el espacio con el que cuentan para el desarrollo de la actividad es «insuficiente». Reclaman medidas en las juntas de distrito desde hace un año, pero no han obtenido ninguna respuesta. «No sabemos qué más hacer», señala Jorge Martín, uno de los afectados. Muchos padres del barrio acuden a otros parques de la ciudad ante esta situación. Reclaman organización y refuerzo de vigilancia policial, para que los efectivos hagan cumplir la normativa. El rastrillo lo componen actualmente alrededor de 150 puestos. Los habitantes dicen que más de la mitad se ubican en el entorno del parque.
La portavoz de Vox, Mónica Rodríguez, se hizo eco en la última comisión de Seguridad Ciudadana de esta situación y pese a las demandas de los vecinos en las juntas de distrito, la única respuesta que han obtenido es una reunión que tendrá lugar en los próximos meses.
Antecedentes
No obstante, los afectados afirman que los problemas se remontan al traslado del mercadillo a la calle Baden Powell, una ubicación que califican de «inviable» desde el principio y que nunca se ha desarrollado de forma controlada y regulada. Recuerdan que «nunca se consultó a los vecinos el cambio», que se ejecutó en primavera de 2023. Los habitantes denunciaron entonces que esta modificación suponía una falta de espacio y la dificultad para mover las furgonetas y mercancías, los mismos problemas a los que se enfrentan a día de hoy.
Los comerciantes llegaron incluso a no montar sus puestos algunas semanas en demanda a lo acordado por el Ayuntamiento de cambiar la localización. Son ellos mismos los que ahora se quejan de las condiciones en las que trabajan. «Ni siquiera contamos con baños portátiles», señala su portavoz, Melchor Tirado. Confirma que ellos también mostraron su oposición a establecerse allí e insisten en que el rastrillo estaba mucho más seguro en Torre de la Pólvora. Además de transmitir la queja en las distintas juntas de distrito y de elaborar en escrito el pasado junio por esta misma cuestión, los vecinos del Zaidín también recurrieron al Defensor del Pueblo un año antes, en verano de 2023 y se reunieron con los técnicos del área de Ocupación de Vía Pública. El portavoz de los vecinos afectados del barrio, Jorge Martín, indica que ellos mismos fueron con Policía Local al enclave para supervisar la situación. Entre las peticiones esenciales que demandaban entonces y que mantienen a día de hoy destacan el traslado de algunos de estos puestos de la zona infantil para que los columpios puedan utilizarse, así como que los accesos no queden impedidos para favorecer la circulación de ambulancias y la evacuación en caso de emergencia.
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