Bares de Granada
La taberna de Granada donde probar callos y torreznos 'al estilo Madrid'Una taberna al estilo madrileño anima la Granada metropolitana con una oferta repleta de productos del Foro, con unas patatas bravas muy especiales y la oreja como insignia
La Chulapa es un viaje de ida y vuelta que conecta La Zubia con lo mejor de la restauración madrileña, esa en la que saben ... tirar la cerveza Mahou como nadie y en cuya barra las patatas bravas tienen un papel preponderante. Y todo ello aderezado con un trato exquisito, cálido y cercano. Muy profesional. La banda sonora la ponía Joaquín Sabina, claro. La terraza es tranquila y el interior está repleto de detalles decorativos muy interesantes, como la nube de botellas de vino que cuelgan del techo a modo de instalación artística.
La Chulapa abrió en abril de 2021 cuando Ángel, madrileño de nacimiento pero de ascendencia de La Zubia se volvió para el sur con una notable experiencia a sus espaldas. Aquí optó por especializarse en un modelo de taberna muy madrileña en la que la cerveza de barril tiene la espuma justa. Entre las especialidades de la casa: los torreznos al estilo de Soria, crujientes y sabrosos, y la oreja a la plancha, manjar de dioses, los que todo el mundo pide y que dejan un inmejorable sabor de boca. Me encantó el cochifrito con pimientos de Padrón y, por supuesto, los callos a la madrileña, que nunca pueden faltar. En una palabra: todo lo necesario para sentirse en el Foro, como un gato a punto de presenciar un partido de Champions o que acaba de salir del museo del Prado.
Los minibocatas de calamares te llevan a la Plaza Mayor y mención especial para las patatas bravas, otra de las especialidades de la casa, con la particularidad de que su salsa no se hace ni con tomate ni añadiéndole picante. «Utilizamos la receta clásica de Docamar y nuestra salsa se hace con pimentón de la Vera ahumado y caldo», explican desde La Chulapa.
Más productos que caracterizan su propuesta gastronómica: la papada de cerdo ibérico, el lacón y la cecina de León como entrantes y embutidos. Tienen una asombrosa variedad, y calidad, de conservas de toda la vida: anchoas de Santoña, zamburiñas de Cambados, mejillones de las Rías Baixas y berberechos de Vilagarcía de Arousa. Las carnes rojas del País Vasco y, de la tierra, el lagarto y el secreto, muy demandados.
Y que no se nos olvide el auténtico y magnífico cocido madrileño, tal y como lo sirven y comen en la capital de España. Ya lo dice su carta: de Madrid al cielo. Y es cierto, allí se flota. Si la cerveza bien tirada es una tentación, atención a las más de 80 referencias de vinos, que todas ellas se pueden pedir para copeo, incluyendo algunas de Granada. Para amantes de la buena gastronomía, las terrazas amables y las barras con encanto, historia y tradición, en La Chulapa encontrarán el mejor ambiente, con una clientela entre los cuarenta años de edad de promedio y, hay que insistir, un trato amable y profesional.
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