Roban una perra en un domicilio de Granada y les estafan 100 euros al pedirles un falso rescate
La familia, que ofrecía una recompensa para el que la entregase «sana y salva», le ingresó el dinero a un hombre y no volvió a saber de él
María (nombre ficticio) lleva dos denuncias interpuestas en apenas un mes. La primera, por el robo de dos perros en un domicilio de Granada. El ... primero apareció a las horas, pero para encontrar al segundo tuvieron que esperar un mes. Durante este periodo, desesperada por encontrar a la perra desaparecida, movió cielo y tierra para dar a conocer la pérdida de la mascota. Ofrecía una recompensa –sin especificar la cantidad- a aquel que la entregara «sana y salva». Y le estafaron, por lo que tuvo que volver a pasar por la comisaría para denunciarlo.
La familia difundió la desaparición en redes sociales, publicándolo en grupos de Facebook de los 174 municipios granadinos. También empapeló la provincia con imágenes del animal en las que indicaban que ofrecían una recompensa. No especificaron la cuantía, pero la cantidad reclamada por un hombre que supuestamente podía recuperarla fueron 100 euros.
En medio de este jaleo, María recibió la llamada de un hombre de Málaga que aseguraba que una pareja le ofrecía una perra preciosa a cambio de 100 euros y que, sin lugar a dudas, era la suya. En concreto, el individuo le explicó que semanas atrás le habían robado su perro, provocándole un gran pesar. Para compensar la pérdida, publicó un anuncio en un portal de compraventa en busca de un animal a buen precio y una pareja se puso en contacto con él para ofrecerle una perra. Al verla, estaba «completamente seguro» de que era la de María. Y es que, según expone la denuncia, el hombre de Málaga supuestamente había visto el anuncio del animal desaparecido en Granada y rápidamente detectó la coincidencia.
La pareja que vendía el animal presuntamente pedía 100 euros por él. Era urgente el pago, puesto que «los vendedores se tenían que ir». En teoría, el hombre malagueño recibiría el dinero y se lo daría a la pareja. Si al final resultaba no ser la perra de María, le aseguró que le devolvería el dinero.
Ingreso bancario
La desesperación por encontrarla hizo que cayera en la trampa. «Le hice un ingreso bancario y me dijo que iba a por la perra, que estuviera tranquila, que seguro era ella, en todo momento me hablaba con confianza. Al rato me bloqueó de WhatsApp y no supe nada más», lamenta la granadina.
Al indicar su teléfono móvil en el anuncio de la desaparición les llamaron de toda España: Madrid, Barcelona, Asturias… Incluso recibieron bromas pesadas, que aseguraban haber encontrado «a la perra muerta en el cementerio». Finalmente la encontraron 28 días después de su desaparición. Para ella esa es la mayor de las alegrías, aunque ahora reclama que el hombre devuelva los 100 euros que recibió por algo que nunca cumplió.
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