El restaurante Óleum presenta el XI Encuentro Gastronómico Astur-Granadino

Allí estaba el alcalde de la ciudad, Francisco Cuenca, que destacó, no solo el interés de la propuesta, sino también la labor de Gregorio en tierras asturianas añadiendo más valor porque «va allí como embajador». Y es que esto del encuentro astur-granadino va mucho más allá de estas importantes jornadas, porque, además de responsable de un establecimiento, el presidente de la Federación de Empresas de Hostelería y Turismo de Granada acude al norte como miembro de la Cofradía de Amigos de las Fabes de Villaviciosa; y jurado del concurso anual de fabada. Y se trae al ganador. Todo un intercambio de buen hacer que es, sin duda, un atractivo más.

Este año la 'mejor fabada del mundo' es la del restaurante Cocina Cabal, «una apuesta innovadora», a cargo de un joven chef, Vicente Cabal, al que también le gusta la tradición. Y, con su forma de entender este plato, se configuran las jornadas del Óleum que, como destacaba el delegado del Gobierno andaluz en Granada, Antonio Granados, tenemos que conocer y disfrutar, «que once años de trayectoria no es algo fácil».

También intervino el diputado José Enrique Medina, que, como responsable del Patronato Provincial de Turismo, hizo hincapié en nuestra «cocina de categoría», lamentando que aún no tengamos una estrella Michelin. Y no será por grandes de la cocina, algunos no quisieron faltar, caso de los hermanas Pedraza, Miguel y Pepe, de La Ruta del Veleta; o nuestros clásicos imprescindibles, Chico Fernández –mucho tiempo sin vernos– o mi querido Diego Morales.

También acudieron la directora del Patronato de la Alhambra y el Generalife, Rocío Díaz, la concejala Eva Martín; así como Beatriz Sánchez y Mónica Rodríguez, también del ayuntamiento de la capital; sin olvidar al delegado de Medio Ambiente de la Junta, Manuel Francisco García. Delegado fue también en la anterior legislatura, de Turismo, concretamente, Gustavo Rodríguez, al que me alegró mucho saludar. Estuvieron presentes el presidente de la Audiencia Provincial, José Luis López Fuentes; el decano del Colegio de Abogados, Leandro Cabrera; el gerente de la Cámara de Comercio, Joaquín Rubio; y el secretario general de la Federación de Hostelería y Turismo, Antonio García.

Si la oferta gastronómica –con guiño a la zona de Huéscar, de donde Gregorio es otro gran embajador– fue buena, la compañía no fue menos agradable.

Una reunión con Carlos Hernández, responsable de Relaciones Institucionales de El Corte Inglés, al que saludé junto al jefe de Seguridad, Eleuterio Rodríguez; Francisco Álvarez de la Chica, Jerónimo Páez, Mariano de Damas, Juan Ruiz y otras muchas caras conocidas y, en algunos casos, habituales del establecimiento donde, me consta, hay buenas tertulias.

Saludé a mi subdirector, Quico Chirino, que también estuvo presente, al igual que Francisco Barranco, director del Palacio de Congresos, y Pablo Mariscal; Néstor Velasco, de Divingra, o Julián Martín, del Grupo Abades.

Las jornadas tendrán lugar del 22 al 25 de noviembre y, como decía Gregorio, «siempre habrá un 'laíllo' para meterse». Eso sí, yo pensaría en ir reservando, que luego nos quedamos sin sitio.

Y merece la pena, como disfrutamos en el previo, donde también saludé a Juan Carlos Rodríguez, durante muchos años responsable de Relaciones Institucionales de Coca Cola; a Jorge García Faciabén, de Granada Premium; Ignacio Valenzuela, de Cetursa; y charlé con Manolo Oña, Encarna Pérez, Esther Tovar y los compis de la Cope Gabino García y Laureano Santana.

Seguro que me quedo con algunos en el tintero. Lo que también me quedo es con el buen sabor de la comida de aquí y de allá. Me toca muy cerca porque estuve viviendo cuatro años en Asturias. Y eso de la fabada, qué quieren, me gusta. Así que, no siendo imparcial, qué gran idea. Lo mismo que pensarán allá de nuestra cocina.