El restaurante de Granada que abre todo el día: «Somos irreverentes y sorprendemos»

«Somos un restaurante que cuenta con dos propuestas: platos tradicionales con un toque irreverente y luego recetas sorprendentes con las que salimos de lo tradicional», cuenta a IDEAL Sergio Chaves, encargado del restaurante. El pasado mes de diciembre celebraron su cuarto aniversario y Sergio reconoce que el negocio va sobre ruedas, algo que queda claro al observar la mayoría de reseñas que hay sobre él en plataformas como TripAdvisor o Google.

«La gente suele ir a los establecimientos que mejor nota tienen, así que es un escaparate para nosotros. Nos da mucha felicidad ver las buenas críticas porque es un reflejo de lo que hacemos aquí dentro», reconoce. Y la clave para esas buenas reseñas no es otra que la comida y buen servicio que ofrecen durante todo el día, desde que abren para dar desayunos hasta que cierran por la noche.

En lo relativo a los desayunos, disponibles de 09:00 a 12:00 horas, ofrecen desde el clásico café con tostada hasta opciones más propias de un 'brunch' americano, con cruasanes con todo tipo de rellenos, tortitas y bagels. Y al terminar con los desayunos empiezan a servir sus «tapas irreverentes». «Todas las tapas son caseras. Tenemos montadito de pulled pork, carne en salsa, tartar de salchichón y los sábados migas».

En lo referente a comidas y cenas, la propuesta del restaurante es bastante amplia, con especialidades que van desde los canelones con ragú de carne y bechamel trufada, que es uno de los platos más vendidos de la carta, hasta su costillar asado durante 24 horas con salsa barbacoa casera. Sin olvidar sus croquetas, el falso risotto o sus tortillas de patatas rellnas. Y por las tardes, además de cafés, bebidas y copas, las tortitas y los crepes vuelven a tomar el protagonismo.

Con el año 2025 recién comenzado y habiendo celebrado su cuarto aniversario hace tan solo unas semanas, el encargado de Irreverente tiene claros los objetivos a cumplir durante los próximos meses: «Es el año de ir a más: hacer platos más arriesgados y proponer cosas chulas». Entre ellas, organizar menús con maridajes «diferentes», catas de vino y muchas otras cosas. «Queremos sorprender a nuestros clientes con cosas que no hemos hecho hasta ahora», finaliza.