¿Qué se van encontrar los visitantes del Maristán, la nueva joya turística de Granada?
El edificio recupera la historia del hospital nazarí del siglo XIV y la de la casa de la moneda. Ahora una exposición temporal cuenta cómo ha sido la restauración de espacios como la sala de terapias que posteriormente fue la de los tesoros
Laura Ubago
Granada
Jueves, 12 de enero 2023, 00:47
El Maristán forma ya parte del patrimonio granadino. Los visitantes pueden disfrutar de un espacio único, un antiguo hospital nazarí del siglo XIV, cuyo proyecto ... de recuperación llevaba paralizado varias décadas. La visita al Maristán se incluye ya en la Dobla de Oro, un itinerario cultural diseñado para impulsar la unión del Albaicín, el Centro y la Alhambra. Se trata de la nueva joya turística de Granada, un atractivo más para la ciudad.
La primera sorpresa que se encuentran los visitantes al llegar al Maristán son las impresionantes vistas de la Alhambra desde este lugar. En la parcela del Maristán, hay ya un pórtico y unas estancias que meten al visitante en una máquina del tiempo para conocer cómo era un hospital de la etapa nazarí. Hasta un trozo de una pipa, con la que se fumaban sustancias con fines terapéuticos, ha aparecido enterrada en este solar.
La visita al Maristán es gratis los domingos. El horario de invierno es de 10 a 17. Las entradas se pueden comprar en la web del patronato de la Alhambra y cuestan 7,42 euros si se combinan con el resto de monumentos andalusíes de la Dobla de Oro como el Palacio de Har al Horra o el Bañuelo.
Del pórtico sur se han recuperado los restos emergentes del pabellón (muros, pilares, vigas, zapatas y alfarjes) para hacer visible la configuración original del edificio, abierto hacia un patio interior con peristilo, galería y habitaciones distribuidas en torno a estos. La terminación de la cubierta expresa la prolongación futura de los pabellones este y oeste gracias a unos frontones que dejan ver la estructura interior.
El arquitecto Pedro Salmerón, responsable del proyecto, cuenta cómo los hallazgos sobre el terreno han cambiado el sentido de la restauración y cómo enriquecen la visita. Uno de estos hallazgos es la aparición de unas letrinas de época de la Casa de la Moneda y una conexión clarísima del hospital hacia esta calle.
Otro hallazgo es un pasillo –que en principio les parecía una estancia estrecha– que da salida a un patio (ahora es de una vecina particular) y donde se supone estaba el huerto. También han aparecido restos de un pavimento en toda la zona que bordea la alberca. No son muy grandes pero eso les indica que el perímetro de la fuente estaba pavimentado con un formato de ladrillo nazarí especial.
El descubrimiento que más aporta son unos hornos de fundición de la Casa de la Moneda que estuvo allí nada más llegar los Reyes Católicos. Fue una instalación industrial muy importante, de un valor económico trascendental, con muchos operarios, y ellos vivían allí.
Exposición para descubrirlo
Ahora, además hay una exposición bajo el título 'El pórtico sur del Maristán. Restauración'. Se trata de una muestra temporal que explicará la restauración llevada a cabo en el edificio, así como las relaciones espaciales del mismo con el Albaicín. La exposición está comisariada por Pedro Salmerón y Ángel Rodríguez, y se organiza en cuatro salas de la planta baja del edificio. En la primera, se exponen los diferentes ámbitos del Maristán, así como los hitos fundamentales del entorno, tanto en época medieval como en las posteriores, dando sentido a su inserción en la ciudad de Granada a lo largo del tiempo.
La segunda sala presta una especial atención a los modos de vida que han dejado huella y que se conocen gracias a la investigación arqueológica asociada a la intervención: el Maristán como hospital nazarí y su uso posterior como Casa de la Moneda. Por otro lado, el descubrimiento de una importante conexión con una huerta y jardín situada al sur, en el espacio comprendido entre el Maristán y la muralla que limitaba con el río Darro, se presenta en la exposición con una recreación mediante infografía. La última sala está dedicada a su construcción, desvelando las técnicas del tapial que forma parte de los muros, los trabajos en madera para la construcción de las vigas, zapatas y alfarjes o los revestimientos.
Además de la muestra, se puede visitar igualmente la planta alta del Maristán, donde estaba ubicada la sala de terapias y otros usos del hospital nazarí y, posteriormente, fue utilizada como Sala del Tesoro durante la etapa de funcionamiento como Casa de la Moneda, a partir de la llegada de los Reyes Católicos. De esta época se pueden contemplar asimismo restos emergentes en el patio, como hornos de fundición emplazados en el lado este, o la alberca recuperada parcialmente.
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