«Esto es la puntilla para la hostelería de Granada. ¿Qué nos va a quedar?»

«Esto es la puntilla». Así de gráfica ha sido la valoración del presidente de la Federación de Hostelería y Turismo de Granada, Gregorio García, tras escuchar el anuncio que ha hecho esta tarde en Granada el consejero de Salud y Familias de la Junta, Jesús Aguirre.

El presidente de la Federación de Hostelería y Turismo de Granada entiende que la situación de Granada es crítica y que la salud es lo primero, de hecho ayer mismo propusieron medidas al Ayuntamiento para contribuir a frenar la pandemia como el adelanto de una hora el cierre y la limitación de aforo. Sin embargo, el cierre a las diez de la noche que impodrá la Junta de Andalucía a partir de mañana limitará por completo la posibilidad de dar cenas y es la medida más dañina y «absurda» en opinión de García. «¿O es que no se pueden contagiar igual desde las ocho de la mañana hasta las diez de la noche?», se pregunta.

«Entendemos que la situación es grave, pero no nos pueden parecer bien estas restricciones. No lo entendemos, a ningún político le han cerrado su negocio, no sabe lo que se siente. Parece que el virus es la hostelería», esgrime García, muy preocupado por la situación de su sector.

«Esto no es Europa, nadie va a salir a cenar para estar terminado antes de las diez de la noche lo que limita aún más la posibilidad de hacer caja. ¿Qué nos va a quedar? ¿O es que nos van a ayudar las administraciones cuando no tengamos ningún ingreso?«, insiste García.

El propio consejero de Salud y Familias ha reconocido en su comparecencia que las medidas son «duras para un sector tan sacrificado y que tan mal lo está pasando» pero ha defendido que son «necesarias». Asimismo, Aguirre ha reconocido y agradecido el comportamiento de los hosteleros granadinos «que son conscientes de que hay un problema y hay que atajarlo».

Mejor se han tomado a priori las medidas en el comercio granadino, que verá reducido el aforo al 50%, a partir de mañana sábado, mientras que no verá limitado su horario de cierre, que se establece a las diez de la noche.

«Todo lo que sean restricciones y limitar la movilidad perjudica al comercio pero en estos momentos la salud es lo primero», valora la presidenta de la Federación granadina de Comercio, María Castillo.

Las colas en las puertas de los negocios, que previsiblemente volverán mañana a algunos establecimientos al limitar el aforo a la mitad, son muy dañinas en tanto que los clientes se impacientan y perjudican al servicio. «Pero nos adaptamos y lo hacemos lo mejor posible, las nuevas restricciones perjudicarán aún más al consumo pero en estos momentos hay que ser muy cautos, no podemos jugarnos la vida«, asume Castillo.