Reabre en Mecina Bombarón el Museo Fotográfico de La Alpujarra

El Museo Fotográfico de la Alpujarra se ha convertido en uno de los principales atractivos de este pueblo alpujarreño que junto con Yegen, El Golco y la aldea de Montenegro forma el municipio de Alpujarra de la Sierra. Las instantáneas que se exponen en este espacio fueron realizadas por el corresponsal de IDEAL en La Alpujarra desde hace más de tres décadas, Rafael Vílchez Fernández, residente en Órgiva desde hace casi cuatro décadas y nacido en Dúrcal el 11 de diciembre de 1954.

En las instantáneas en blanco y negro y a color se reflejan la arquitectura, gastronomía, folclore, cultura, leyendas y personajes singulares de los distintos pueblos que conforman la comarca de La Alpujarra. Cuando Rafael Vílchez comenzó primero a visitar la zona en 1968 vendiendo productos de ferretería en los mercadillos con Paco 'Gañía', de Dúrcal. Por las tardes acudía a la Escuela de Artes y Oficios de Granada para aprender a pintar con Nicolás Prados y otros maestros. Años antes, su padre Rafael, también estudió dibujo y pintura con Gabriel Morcillo. Rafael Vílchez después del servicio militar y tras contraer matrimonio se fue a residir Lanjarón y puso una marquetería y cristalería. A los pocos años se mudó a vivir a Órgiva.

Rafael no pudo resistirse a dejar constancia de aquello que tanto le transmitía y le sigue transmitiendo. De este modo el Museo Fotográfico de Mecina Bombarón constituye uno de los mayores documentos visuales públicos de La Alpujarra. Rafael Vílchez fue premiado con la medalla de oro, que conserva, en un concurso de pintura en su pueblo. También, y gracias a su contribución con La Alpujarra para darla a conocer dentro y fuera de España, en prensa, radio y televisión, ha obtenido a lo largo de las últimas décadas nueve premios, entre ellos, el de Turismo de la Diputación, el Premio Imagen de Granada, de la empresa MA Hoteles «por dar a conocer con pasión las costumbres, tradiciones y atractivos de la comarca de La Alpujarra». En Padul también ha sido homenajeado y en el Hotel Velázquez de Madrid y en la Bodega Cuatro Vientos de Murtas. Algunas de las fiestas que se celebran en La Alpujarra las inventó Rafael Vílchez. Muchas emisoras de radio, televisiones, agencias… recurren a Vílchez para que les cuente algo interesante sobre La Alpujarra y el Valle de Lecrín.

El Museo Fotográfico de la Alpujarra constituye un atractivo no solo para los amantes de la fotografía sino para aquellos que van buscando en La Alpujarra ese lugar tranquilo y remoto. Rafael Vílchez no tiene ningún afán por pasar a la historia pero ha impregnado sus instantáneas de ella, de historia e historias. Las imágenes de Vílchez son de las que se puede decir que valen más que mil palabras por que se explican por sí mismas.

La Alpujarra es un exponente de cultura y de tradiciones heredadas de tantas civilizaciones como han pasado por ella y que han sido asimiladas como propias. La Alpujarra tan peculiar, tan misteriosa y tan interesante ha atraído desde siempre a numerosos estudiosos, pintores, historiadores, literatos… que la han divulgado a los cuatro vientos desde Estrabón, que describe una Ulissea, precursora de la actual Ugíjar, pasando por Hurtado de Mendoza y Ginés Pérez de Hita, Calderón de la Barca, Pedro Antonio de Alarcón o los viajeros románticos; los más modernos como Gerald Brenan, Jean Christian Spahni o Harold López Méndez hasta estudiosos como, y por ejemplo: Miguel Carrascosa Salas, Joaquín Rincón, Francisco García Valdearenas, Antonio Carmona, Eduardo Castro, Juan Manuel Jerez, Isidro García. Juan González Blasco, Paquita Manzano, Pedro Vargas, Antonio Funes, Miguel Estévez, José Antonio Jiménez, José Ruiz, Francisco Izquierdo, José González, Antonio Torres, Agustín Laborde, Pio Navarro Alcalá-Zamora, José Luis Puga, etcétera.