PSOE y PP se comprometen a vetar las macrogranjas en Jérez del Marquesado

El alcalde de Jérez del Marquesado, el socialista José Ángel Pereda, y la concejal del PP María Inés Beas firmaron un escrito en el que se comprometen a «llevar a cabo los cambios legales necesarios para conseguir un ordenamiento del territorio» que «prohiba expresamente las granjas intensivas de cerdos».

En el escrito se comprometen a aprobar en el próximo pleno una declaración institucional «en contra de las granjas de cerdos intensivas», a favor de las actuales explotaciones familiares de pollos, cerdos, cabras y vacas, y de respaldo a «cualquier iniciativa respetuosa con el medio ambiente y con el paisaje jerezano que genere infraestructuras turísticas».

Esta última alusión hace referencia a la fundación interespiritual Centro Persona y Justicia, que prevé invertir más de un millón de euros en un complejo educativo, agrícola y turístico en una finca de 85.000 metros cuadrados colindante con la parcela adquirida por la empresa murciana. El portavoz de la plataforma vecinal, César Triviño, aseguró a IDEAL que el pueblo, de 1.100 habitantes, está «levantado» de forma «unánime» contra el proyecto de la granja y, como prueba, destacó que más de 300 personas acudieron a la mesa redonda.

«No entendemos por qué el Ayuntamiento no da una negativa rotunda a la solicitud de la industria», afirmó Triviño, convencido de que el número de cerdas especificado en el proyecto (749) es una simple artimaña de la empresa para lograr los permisos sin entrar en la clasificación de 'macrogranja', y después realizar sucesivas ampliaciones, como ya se ha hecho en otros municipios del norte de Granada. Recordó además que la instalación prevé dos balsas de 800 metros cúbicos de purines «imposibles de reciclar», ya que su volumen excede la cantidad utilizable como abono agrícola, que generarían malos olores en kilómetros a la redonda, serían una amenaza para los acuíferos y arruinarían cualquier apuesta por el turismo sostenible y de calidad.

El alcalde, por su parte, matizó que entre los asistentes a la mesa redonda había muchos forasteros. «Fui a escuchar al pueblo, pero a mí apenas me dejaron hablar; me abuchearon», explicó. Sí pudieron expresar sus puntos de vista el abogado y miembro de Ecologistas en Acción José Antonio Cabrera y la activista antigranjas Mariló Corral.

Respecto al escrito que firmó junto a la concejala popular, Pereda advirtió que las decisiones municipales «no se toman en asambleas, sino en el pleno», y recordó que, como alcalde, no puede denegar la autorización a una empresa si su proyecto se ajusta a la legalidad, porque incurriría en «prevaricación». En ese sentido, explicó que las delegaciones territoriales de Salud y Fomento de la Junta no han puesto, de momento, pegas al proyecto y que espera un pronunciamiento de la Consejería de Turismo –para saber si es posible instalar una granja porcina a 40 metros del camping de la citada fundación–, que ya tiene licencia y de la Diputación, que deberá determinar si este tipo de industria es compatible con los objetivos del Geoparque.  «Nuestra decisión siempre será en beneficio del municipio. Yo también estoy en contra de las macrogranjas, pero esto no lo es: en una macrogranja hay 6.000 o 7.000 cerdas y aquí, 749», concluyó el alcalde.