Íllora un año después de las inundaciones: un barranco más seguro y carreteras arregladas
La Junta invirtió 1,3 millones en los arreglos de las carreteras A-336 y A-355, entre Íllora y Montefrío, que quedaron destrozadas
En el municipio de Íllora, los principales destrozos se concentraron en la calle del Barranco, del anejo de Alomartes. Allí, la tromba de agua se ... llevó por delante medio centenar de vehículos, entre ellos los que tenía un taller mecánico. La riada también provocó destrozos importantes en las carreteras que comunican Montefrío con Alcalá la Real, Huétor Tájar y Tocón, y el municipio de Íllora con Alomartes. También dejó impracticables decenas de caminos rurales.
Un año después, el alcalde de Íllora, Antonio Salazar (PSOE) explica que se ha mejorado la seguridad en el barranco que se desbordó, gracias a un ensanchamiento y un paso de agua. «La Diputación provincial fue la primera que nos dió ayudas para financiar los trabajos de limpieza y también la Junta, recibimos unos 70.000 euros y el resto lo puso el Ayuntamiento», dice Salazar, que recuerda que los operarios municipales estuvieron más de tres semanas limpiando a mano el cementerio de Tocón, totalmente inundado.
Pero además, la Junta realizó obras de emergencia para arreglar carreras que sufrieron un fuerte deterioro que comprometía la seguridad. Apenas mes y medio después de las lluvias torrenciales, culminaban los arreglos en las carreteras A-336 y A-355, entre Íllora y Montefrío, con una inversión de más de 1,3 millones de euros. El arrastre de materiales y árboles ocasionaron graves desperfectos en la plataforma de estas vías y también se corrigieron los daños producidos en un terraplen y deslizamientos.
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