Los embalses de Granada, en estado de emergencia

Los embalses de Granada se encontraban ayer miércoles a un 30,10% de su capacidad, o dicho de otro modo, de cada diez litros de capacidad hay solo tres ocupados. Los embalses de la provincia pueden almacenar un máximo de 1.021 hectómetros cúbicos de agua, de los que solo hay embalsados 307,4.

La situación de los principales pantanos que abastecen de agua a la provincia de Granada no es uniforme. El embalse de Negratín, uno de los más importantes para el riego de la provincia de Granada, se encuentra a un 34,7% de su capacidad. El Francisco Abellán, que también es uno de los más importantes de la provincia, se sitúa en un 29,03%.

El embalse de Colomera, uno de los pequeños, se encuentra a un 15,07% de capacidad. Otro de los pequeños, el de Cubillas, alcanza solo un 43,36% de su capacidad.

El embalse de Quéntar, uno de los grandes, se encuentra a un 62,39%. El vecino de Canales, que es el que suministra agua a la capital de Granada y a su área metropolitana, se encuentra en un 24,43% y el embalse de Bermejales, cercano a Alhama, en un 27,52%.

En la misma fecha, a 15 de noviembre del año pasado los embalses se encontraban en un 43,59%, es decir, 14 puntos por encima. Diez años atrás, en esta misma semana, los embalses almacenaban un 53,35% de su capacidad.

La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha informado de que en la próxima campaña de riego, que tendrá lugar en mayo, que habrá restricciones importantes si no llueve, aunque el abastecimiento humano está garantizado.

En los años 90 se construyeron pozos de emergencia que se nutren de acuíferos de Granada y de toda la Vega. No ha sido necesario utilizarlos para abastecimiento humano, pero sí para riego.

Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), entre noviembre a enero existe un 25% de probabilidad de que las precipitaciones que se esperan en la provincia granadina sea 'altas'; un 35% que sean 'medias' y un 40%, que sean bajas. La situación de sequía no va a mejorar.