Cádiar suspende su feria de ganado y fiestas del Cristo de la Salud por el coronavirus

Según el profesor, historiador y escritor de Cádiar, Francisco García Valdearenas, «a mediados del siglo XIX, en La Alpujarra se celebraban tres concurridas ferias de ganado: la de Albuñol, la de Órgiva y la de Ugíjar. Cádiar, que en el año 1882 consiguió el título de villa, no podía ser menos. Así que celebró su primera feria de ganados en los primeros días de octubre del año 1897. Durante años, y hasta bien entrados los años sesenta del pasado siglo, el ganado de los pueblos de la sierra era muy demandado por los marchantes de Valencia y Murcia. Los marchantes más asiduos a nuestras ferias y mercados eran: el 'Tío de la Cachimba', que se dedicaba al ganado caballar; Solana, que se dedicaba al ganado vacuno; y el párroco de Válor, don Enrique Ruiz, gran aficionado al ganado y a los tratos. No debemos olvidar a los marchantes del pueblo, gente seria y profesional, entre ellos: Patricio Dumont, Antonio 'El de Borico' y Martín 'El Gitano'», relata.

«Tradicionalmente los tratos se celebraban en los ventorros (levantados con palos y lienzos blancos) y se cerraban con un simple apretón de manos en el que terminaban comprador y vendedor invitándose a una 'latilla' de vino o aguardiente. Tradicionalmente la feria de Cádiar fue un referente en la provincia en cuanto a compraventa de ganado y bestias, haciéndose eco la prensa en repetidas ocasiones. Antiguamente, en los días previos a la feria, muchos labradores no iban a sus labores y se dedicaban a montar 'chambaos'. Durante años fue famoso el ventero portátil de Santos, testigo fiel de cuanto trato se realizaba. Desde los primeros años de la feria, los encargados de los festejos se preocuparon de ofrecer un extenso y variado programa para dar satisfacción a un público de todas las edades. Solía acudir a la feria el fotógrafo Pepe 'El de Berja'. Las corridas de toros atraían muchas personas y nuestra banda de música también», terminó diciendo Francisco García Valdearenas.