Buscan al escultor Manuel Caba bajo los escombros de su casa incendiada en Moclín

El fuego, originado por causas que aún se desconcen, provocó el derrumbe parcial del Cortijo de la Miseria, la vivienda donde residía el artista y donde tenía su taller, en una nave aledaña, en la carretera que va de Puerto Lope a Moclín. Desde la noche del incendio no hay noticias del paradero de Manuel. No tenía coche y las batidas realizadas por el área de alrededor del Cortijo de la Miseria han resultado infructuosas, por lo que, a la vez que van pasando las horas, se desvanece la esperanza de encontrarle con vida y cobra fuerza la hipótesis de que el escultor haya quedado sepultado entre los restos de la vivienda desplomada.

Las horas de búsqueda están siendo una agonía para su familia, sus amigos y los vecinos de Moclín que el domingo colaboraron activamente en las batidas de búsqueda por la zona, ya que Manuel Caba era muy querido y conocido en la localidad.

El incendio se detectó en torno a las 20,40 horas del sábado pero se baraja la hipótesis de que comenzara antes, pues la nave está alejada del casco urbano y las llamas estaban bastante avanzadas cuando por fin se dió el aviso a los servicios de emergencia. Los Bomberos de Granada enviaron dos dotaciones pero su rápida actuación no pudo evitar que el fuego alcanzara a la vivienda.

El incendio provocó el derrumbe parcial tanto del cortijo como de la nave y mantuvo a los bomberos en vilo hasta las 3:54 horas del domingo. Una vez estuvo sofocado el fuego, entró en acción la unidad canina de Granada formada por tres perros, con sus correspondientes cuidadores, y también se trasladó a Moclín, desde Almuñécar, un cuarto animal especializado en la búsqueda de personas entre estructuras colapsadas.

En la jornada del domingo comenzaron ya los rastreos para buscar a Manuel por todo el área cercana al cortijo con la colaboración de más de medio centenar de vecinos de Moclín. El pueblo se ha volcado en la búsqueda de Manuel. Agentes de la Guardia Civil que no estaban de servicio se incorporaran para tratar de ayudar; el alcalde, Marco Pérez, puso la maquinaria municipal para el desescombro de la vivienda y todos los medios a su alcance y ha estado también arropando en todo momento a los dos hijos de Manuel y al resto de la familia. «En Moclín le quieren mucho. Los vecinos no querían parar, no querían dejar de buscarle entre los olivos», contaban familiares de Manuel reconfortados en su dolor por el cariño que están recibiendo del pueblo.

Cada una de las horas de espera del domingo sin que se movieran los escombros, ha sido una tortura para la familia. La investigación judicial requiere un protocolo y además los especialistas aconsejaron esperar al desmonte de las estructuras colapsadas de la vivienda y retirada de tejados para que la búsqueda se desarrollara con garantías de seguridad, ante un posible desplome. Por ahí han empezado este lunes los bomberos que han estrado trabajando en la búsqueda durante toda la jornada.

La familia ha tenido palabras de agradecimiento para el jefe de los Bomberos de Granada, Gustavo Molino y todo su equipo, para Protección Civil, para el puesto completo de la Guardia Civil de Moclín y para todos los vecinos: «Se han volcado».