El alcalde de Víznar señala que la «fuga» de inmigrantes «era de esperar» por la falta de seguridad

Joaquín Caballero ha hecho mención también a que se trata de una cuestión de salud pública, en tanto que, según los datos de que dispone, los dos inmigrantes que faltaron en un recuento en el albergue este pasado miércoles dieron negativo en las PCR, pero a veces estos resultados se revierten y posteriormente son positivos.

En este sentido, ha indicado que las personas allí alojadas, rescatadas de pateras con las que trataban de llegar a las costas andaluzas, son positivos en coronavirus o han estado en contacto con compañeros con covid-19 por lo que, con estas «fugas», el albergue se puede convertir en «un foco de propagación del virus a tener muy en cuenta».

Así las cosas, el alcalde ha vuelto a resaltar que «el espacio habilitado» para la cuarentena de este colectivo, cuyas necesidades ha resaltado que han de ser atendidas de forma prioritaria, «debe reunir unas condiciones específicas que no reúne el albergue de Víznar».

Joaquín Caballero ha explicado que, dentro de la «incertidumbre», con que el pueblo, de unos mil habitantes, recibió la noticia de que el albergue de Inturjoven era habilitado este agosto por la Junta para estas cuarentenas, la situación es de «tranquilidad», y que la noticia de la falta de dos inmigrantes de los llegados en los últimos días «no ha afectado de manera significativa».

Ha resaltado, asimismo, la «impecable» labor de la Guardia Civil, que custodia el edificio, en el marco del dispositivo de seguridad articulado a tal fin, si bien el perímetro es «imposible de controlar», estando el albergue situado en el centro del municipio.

El albergue ha de tener un «uso turístico», ha subrayado, al ser el único de estas características en todo su entorno y dinamizador de la actividad socioeconómica de Víznar y sus alrededores, ha agregado Caballero, quien ha puesto de relieve, a su vez, que «ha superado» el aforo para el que se habilitó para estas personas, unas 50 plazas, alcanzado la ocupación de «aproximadamente 64» con la llegada de varios grupos, el último, con una decena de inmigrantes de origen argelino, este pasado martes por la noche.

Ha negado que «nadie» pueda dar «lecciones» de «racismo» o «solidaridad» a Víznar, en tanto que los primeros equipos de protección y mascarillas de las que dispusieron estas personas las facilitó el Ayuntamiento, y ha habido colectivos y vecinos que, en paralelo, se han organizado para llevarles libros o juguetes.