Borrar

El canal de las arenas... y montesas

Con el agua del río Dílar crea un eje vital a través de las dolomías del Trevenque y es un privilegiado mirador de la cuerda alpina de Sierra Nevada | La Espartera recorre siete kilómetros de un territorio poblado de joyas botánicas únicas en el mundo y es paso obligado de fauna y senderistas que se internan en los arenales del Trevenque

Juan Enrique Gómez

Lunes, 4 de agosto 2014, 01:19

Tres machos cabríos de poderosas cuernas bajan hacia los prados de un viejo cortijo situado a la sombra de los Alayos. Caminan entre retamas y ... jarales para llegar al lugar donde cada tarde, se dan cita grupos de hembras que durante el día deambularon entre cortados y vaguadas acompañadas de sus crías, y que al crepúsculo buscan la compañía de la manada. El cortijo Sevilla, situado poco más arriba de la conocida Fuente del Hervidero, es el cruce de caminos que por diversas rutas descubren los secretos de Sierra Nevada y un punto neurálgico para el conocimiento de la gran cordillera Bética, pero también un lugar donde la fauna silvestre y doméstica encuentra alimento y refugio.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

ideal El canal de las arenas... y montesas

El canal de las arenas... y montesas