Polémica por la tala de un pino de 25 metros en el recinto del Hospital Real

El ejemplar tenía un porte de 25 metros, y fue plantado hace alrededor de unos 30 años. Desde la entidad universitaria dicen haberse visto obligados a acabar con el pino debido a que comprometía la seguridad de los trabajadores o usuarios de este lugar. Había riesgo de que se cayese hacia su cara Norte. Así lo han dejado 'negro sobre blanco' en un informe técnico. En él apuntan a que aunque el pino presentaba un aspecto general «saludable», tenía un «evidente» desequilibrio en la copa. Esto se hacía patente sobre todo en la jardinera donde se ubicaba el árbol, que ya estaba desplazando a un muro cercano, que presentaba ya grietas importantes.

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Sus 25 metros y problemas estructurales hacían temer a los técnicos que un día se cayese. Ante la imposibilidad de salvarlo en un hipotético trasplante a otro lugar, decidieron talarlo. Primero le quitaron las ramas y después, con el tronco completamente desnudo, se fue cortando poco a poco hasta ser reducido a tajadas, que se acumulan hoy en el mismo jardín que presidía.

Toda esta justificación no se acepta por parte de algunas asociaciones ecologistas y particulares que están moviendo el asunto. Incluso se prevé que el episodio acabe siendo denunciado ante el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Granada. Creen que la UGR no tenía permiso para llevar a cabo la tala. Por su parte, fuentes de la Universidad reiteran que el árbol no se ha cortado «por gusto» y que todo se ha tenido que hacer de forma urgente tras las conclusiones del informe.