La polarización política convierte los conflictos ideológicos en la principal causa de delitos de odio en Granada
Las estadísticas de este tipo de criminalidad, que publica el Ministerio del Interior, señala asimismo que en 2021 se vivió un importante incremento de acciones homófobas
Los delitos de odio motivados por diferencias ideológicas fueron los más habituales en Granada a lo largo de todo 2021, según el último informe que ... en este sentido ha emitido el Ministerio del Interior. Aunque las cifras absolutas no son elevadas, ya que la provincia muestra una de las tasas más baja de este tipo de infracciones de todo el entorno andaluz, el dato muestra una tendencia preocupante y no muy habitual que, entre otras causas, se deriva de un incremento de la polarización política. Dentro de la comunidad autónoma, solo Huelva muestra un dibujo similar.
En concreto, cuatro de los catorce delitos de odio reconocidos en Granada se debieron a confrontaciones ideológicas, lo que supone algo más de un cuarto del total; en concreto, el 28,6%. En segundo lugar se sitúan los hechos punibles derivados de la discriminación por orientación sexual o de género, que fueron tres; los incidentes xenófobos y racistas, que hasta hace bien poco eran los más habituales en la provincia, sumaron solo dos en todo 2021, igual que los provocados por maltrato a personas enfermas. También se registró un incidente por diferencias religiosas, otro por discriminación por razón de sexo y, finalmente, uno por antigitanismo.
Más delitos
El dibujo general ha cambiado de manera significativa con respecto al último informe con datos previos a la pandemia, es decir, el publicado en el año 2020 con las cifras del año previo. Lo primero que se detecta es un incremento en el número de delitos del que Interior tiene constancia, que pasan de 11 a 14 (+27,3%). También crece, y de manera más fuerte, la cifra de personas que han sido víctimas de estos delitos de odio, que en 2019 fueron 12 y en 2022, 17 (+41,7%).
En aquel momento, los incidentes relacionados con el racismo y la xenofobia fueron los más habituales de la provincia granadina, ya que coparon prácticamente la mitad del conjunto; en concreto, fueron 5 de 12, algo más de cuatro de cada diez. Por contra, solo se registró uno debido a disputas ideológicas en todo el año, lejos de los cuatro del último informe. También destaca la aparición de incidentes relacionados con la enfermedad de las personas, que eran inexistentes antes de la pandemia. Finalmente, la situación con respecto a los delitos de odio por causa de condición sexual no muestran grandes diferencias en este período.
Homofobia
Este hecho resulta una anomalía en Granada en relación con su entorno, ya que el propio Ministerio del Interior alertó de un incremento de los incidentes homófobos con respecto a períodos previos. En lo que se refiere a la comunidad autónoma andaluza, 62 de los 191 delitos de odio registrados tuvieron su origen en la discriminación por orientación sexual, lo que supone prácticamente un tercio del total (32,4%), lo que la convierte en la causa más habitual de estos hechos delictivos.
Por detrás se sitúan los derivados de posiciones racistas o xenófobas (49) y los ideológicos (30), lo que demuestra que esta creciente polarización no afecta solamente a la provincia granadina.
Menos detenidos
La estadística muestra, además, alguna cuestión interesante relacionada con la investigación y enjuiciamiento de estos delitos, como que en 2021 se produjeron menos detenciones relacionadas con estos hechos que dos años antes y que ha descendido el porcentaje de hechos esclarecidos por las autoridades.
La comparativa con las cifras previas a la irrupción de la pandemia muestran que los catorce delitos identificados por Interior se saldaron con solo cuatro detenidos, mientras que en 2019 habían sido cinco pese a que el global de infracciones fue menor, de 11 frente a 14. Además, se resuelven menos casos de este tipo. Hace tres años, de hecho, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado resolvieron satisfactoriamente 10 de los 11 incidentes, es decir, el 91%. Mientras tanto, el año pasado cifra fue bastante inferior, ya que se esclarecieron 8 de 14, es decir, algo menos de seis de cada diez (el 57,1%).
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