La plantilla votará hoy una oferta de Rober para desconvocar la huelga de transportes
Los trabajadores, que cortaron ayer la Gran Vía para exigir una revisión salarial vinculada al IPC, mantienen un paro total convocado para mañana
La unión de la que ha hecho gala históricamente la plantilla de Transportes Rober, concesionaria del servicio de transporte urbano de la capital, es la ... que les ha permitido tener un convenio laboral con «condiciones buenas y dignas» que están dispuestos a defender con uñas y dientes. Así lo contaba ayer Emilio Martín, que conduce los autobuses urbanos de la capital desde hace 29 años.
«Si no llegan a subirnos el IPC, que se acerquen, pero no estamos dispuestos a seguir perdiendo poder adquisitivo», advertía el veterano chófer que fue uno de los trabajadores de Rober que en la mañana de ayer se ha echaba a la calle para hacer fuerza en el pulso que mantienen con la empresa propietaria, Grupo Alsa, por la negociación del nuevo convenio colectivo.
La cláusula de revisión salarial conforme al IPC cuando finalice el año es el gran escollo que ha mantenido alejadas las posturas de trabajadores y empresa.
Transportes Rober tiene 560 trabajadores pero como la de ayer no fue una jornada huelga, la mitad estaban cubriendo el servicio. La otra mitad, los que entraban en turnos de tarde, salieron en manifestación a las nueve de la mañana desde los Jardines del Triunfo. Eso sí, entre que caminaban en hileras separadas a lo ancho de la Gran Vía y que iban cargados con petardos, bocinas y pitos hicieron ruido como si fueran la plantilla entera.
«Esperanza»
Apoyados por las secciones sindicales CC OO, UGT y CSIF, realizaron el recorrido hasta la plaza del Carmen, donde corearon consignas para pedir al alcalde de Granada, Paco Cuenca que medie en el conflicto laboral.
«Transportes Rober tiene 60 años y los compañeros más antiguos se dejaron la piel para que tengamos unas condiciones dignas que vamos a defender. Estamos todos unidos y seremos un martillo pilón. Que sepa la multinacional lo que ha comprado», arengaba el presidente del Comité de empresa, José Manuel Roldán, a sus compañeros en la plaza del Carmen. Entre aplausos, se mostraron dispuestos a seguir en la calle «hasta el año que viene si hace falta».
La protesta obligó a cortar la circulación de Gran Vía y Reyes Católicos durante dos horas y afectó al recorrido de nueve líneas de autobuses urbanos que fueron desviadas por Recogidas y Camino de Ronda. A las once de la mañana la protesta se disolvía y los representantes del comité de empresa de Transportes Rober, presidido por CC OO, volvían a sentarse con la compañía propietaria, que les convocó a una reunión de urgencia.
La negociación fue maratoniana. Después de cuatro horas de reunión, los trabajadores se levantaron de la mesa con una oferta por parte de la empresa que contempla una subida salarial de la que, por el momento, ambas partes han evitado que trasciendan los detalles.
El paro de mañana
Fuentes de la empresa concesionaria, aseguraron que mantienen la esperanza de que esta propuesta permita desconvocar el paro total que amenaza con dejar mañana viernes día 10 el transporte urbano de la ciudad en servicios mínimos.
Las asambleas de trabajadores, convocadas en turnos de mañana y tarde, a las 9.30 y a las 18.00 horas, votarán hoy si se acepta la oferta y por tanto se desconvocan también los paros, que se mantienen para los días 15 y 17 de junio, coincidiendo con la feria del Corpus. Si no hay acuerdo para el próximo 20 de junio la plantilla está llamada a secundar una huelga indefinida.
La propietaria de Transportes Rober, Grupo Alsa, reiteraba ayer su «esperanza» en cerrar el conflicto laboral y subrayaban los esfuerzos por llegar a un acuerdo, que les han llevado a plantear siete ofertas en los últimos días. Confían en que la de ayer sea la definitiva.
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