El parque de la Chana que ya no tiene niños
Los vecinos de la calle Circunvalación Encina se quejan del «abandono, inseguridad y la falta de oportunidad para que los jóvenes del barrio jueguen en las instalaciones de la avenida»
Guadalupe García
Viernes, 8 de agosto 2025
El estado de la calle Circunvalación Encina, una de las calles históricas del barrio de La Chana, está siendo motivo de crítica por parte de ... sus vecinos. Los residentes alegan que la calle sufre «abandono, inseguridad y la falta de oportunidad para que los niños del barrio jueguen en las instalaciones de la avenida» debido a la excesiva ocupación de los espacios infantiles por adultos, la retirada de los recreativos en el parque y la falta de mantenimiento global. La presidenta de la asociación de vecinos de La Chana, Paqui López Sanz, concuerda con que la calle necesita «una reforma general inmediata» y que se tiene registro de las quejas de los residentes. Sin embargo, estos arreglos no están confirmados ni tienen fecha definida. El Ayuntamiento por su parte, corfirma haber actuado en casos de botellón, pero no categoriza la situación como alarmante.
La visión de vecinos como Maruja o Aaron afirman haber vivido toda su vida en ese barrio y «nunca haberlo visto tan dejado como en estos años». El parque se distribuye en dos zonas infantiles a los extremos, una pista polideportiva y un parque de columpios, y un paseo de bancos, jardines y fuentes que los conectan. «Es que estoy sentada con la gente y enseguida me comen los mosquitos de toda la basura que hay entre las plantas», afirma Maruja.
1 /
Algunas, como Mariló, afirman que parte del cambio se inició en la pandemia: «Gente comenzó a venir a las canchas, sin ser del barrio, cuando todavía no se podía salir. Después de eso empezaron los botellones, a quedarse hasta las tantas y a acaparar el espacio». Otros hablan de posibles reformas que se pudieran hacer en el parque. «Cuando empezaron a quitar el tobogán y esas cosas, hablé con el alcalde para que pusieran más columpios o lo que fuera, pero me dieron largas. Antes esto era una alegría, estaba lleno de niños y ahora no viene nadie», opina Antonio, el dueño de la cafetería Granollers. Por su parte, Aaron afirma que el aspecto que más le preocupa es la seguridad: «Si te vas un par de calles a la derecha, hay zonas por las que no pasa el camión de la limpieza ni las patrullas. Me preocupa la seguridad de las calles donde vivo, que están dando tirones hasta por el día».
Como iniciativa comunal, se sugirió tambien el traslado de las pistas a otro lugar por las incidencias del ruido, la cual no fue finalmente aplicada. Aaron también cuenta que él y su padre llamaron en distintas ocasiones a la policía para que dieran un toque de atención al grupo de personas haciendo ruido en el parque por la noche, comentando seguidamente que unas veces sí se presentaron y otras no. «Entendemos que están cubriendo una zona muy grande con muy pocas patrullas. Pero es que las reparaciones que notificamos también tardan mucho o no terminan de realizarse», comenta Mariló.
La presidenta de la A.V. lanza un mensaje de esperanza basado en el nuevo contrato de limpieza destinado a toda la ciudad. «De todas formas, a cualquier vecino que tenga un reclamo, le invito a pasarse por la próxima junta el segundo martes de cada mes para que se lleve el seguimiento», declara.
El Ayuntamiento comparte el mensaje de mejora con el nuevo contrato de limpieza y jardines. Añade que las zonas recreativas del parque infantil están controladas y es por exceder la altura de seguridad que tuvo que retirar el tobogán. No obstante, señala que «no tiene constancia de las denuncias en Circunvalación Encina, ni a través de la Policía Local, ni de las junta municipal de distrito», asegurando que se han realizado actuaciones por botellón, pero de manera esporádica y sin requerimiento de los vecinos.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión