«A mi padre le negaban los créditos por la edad y a mi por la inexperiencia»
Alberto y Pablo, de Ogíjares, están cumpliendo su sueño de crear juntos una especial empresa de café gracias a la financiación de MicroBank
Como a todos los buenos padres e hijos, a Alberto y Pablo Cuevas, les unen muchísimas cosas pero, además ellos comparten una pasión muy especial: ... el amor al café. Desde 1985, Alberto, autónomo de Ogíjares experto en electrónica que ahora tiene 60 años, se especializó en el mantenimiento de las máquinas de café de la restauración y durante años se ha dedicado a montar tostaderos, cafeterías de especialidad para clientes y ha trabajado tanto para multinacionales del sector como por su cuenta. A día de hoy es un reputado especialista no solo como técnico oficial de grandes marcas sino como barista. Y Pablo, que se crió en el taller mirando fascinado como su padre reparaba las cafeteras y tostaba los granos, ha seguido sus pasos dedicando muchas horas a estudiar, investigar y perfeccionar el oficio.
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Hace un par de años, el hijo propuso al padre ser socios y crear un negocio de especialidad, aprovechando que tenían una nave industrial en Ogíjares. Soñaban con un novedoso y diferencial espacio multidisciplinar que aglutine el servicio de mantenimiento, con tostadero, aula de formación para baristas y una cafetería de especialidad.
«Siempre he tenido claro que no quería ser empleado ni trabajar por un sueldo, yo quería trabajar por mi sueño y además quería hacerlo de la mano de mi padre. Él tiene la experiencia, yo la fuerza y la juventud un hacemos un gran equipo», explica Pablo, que tiene 25 años.
Además de soñar a lo grande, tanto el padre como el hijo estaban convencidos de que su idea de ofrecer una experiencia completa en torno al café de calidad funcionaría como negocio. Otra historia era convencer al banco de que también se lo creyera y les diera la financiación. «Nos negaban los préstamos, a mi padre por la edad y a mi por lo contrario, porque no tenía experiencia. Nos daban, por separado, una cantidad que no nos llegaba para nuestro proyecto», explica Pablo.
La ventana
Tras cerrárseles varias puertas, se abrió, por fin, la ventana. En el CADE (los centro de emprendimiento de la Junta) de Albolote, Alicia Sacramento les habló de los microcréditos para emprendedores de MicroBank y, con su asesoría, Pablo trabajó durante mes y medio en la preparación de un informe de viabilidad sobre su negocio. «Era pleno verano creía que iba a estar esperando meses la respuesta y sin embargo en diez días me dijeron que sí, que me financiaban el tope. Fue increíble, podíamos empezar a hacer realidad nuestro sueño», recuerda ilusionado.
Con la financiación atada, las piezas del nuevo Kubik Coffee, que así se llama el proyecto, van encajando y pronto abrirá en Ogíjares la que están dispuestos a convertir en la «mejor cafetería de especialidad de Granada». «Este es mi sueño y no podemos estar más ilusionados, vamos a impulsar la cultura del café de especialidad y acercarlo a todos, no solo al turista que se lo puede pagar en el centro. Queremos que en Granada se pueda tomar café bueno en cualquier sitio como pasa en Barcelona o Madrid», concluye.
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