La oenegé que ha perdido Casa Ágreda aún no ha decidido si recurrirá

IDEAL pudo localizar ayer al abogado de la oenegé que se iba a encargar de rehabilitar el inmueble a través de una fórmula de cesión –un derecho de superficie de 40 años con opción de compra– que al final pondría en manos ajenas la propiedad del edificio. La oenegé, con sede oficial en París, es una fundación denominada AIDEFederation y el jurista que la ha representado es José de Cueto López. El letrado explicó a este diario que estaba ya elaborando «un informe» para la fundación sobre el desenlace que ha tenido el pleito y el horizonte que se abre ahora. Cabe recurso, sí, pero la decisión de recurrir o no, como advirtió, deben tomarla los responsables de la ONG. De momento no hay una decisión. Él considera que «técnicamente es recurrible».

Este pleito, el civil, fue iniciado por el Ayuntamiento de Granada cuando el socialista Francisco Cuenca llegó a la Alcaldía. La ciudad pedía la resolución de aquel contrato que se firmó siendo alcalde José Torres Hurtado por su incumplimiento y, al final, el órgano que ha llevado el pleito, el Juzgado de Primera Instancia 13, ha dado la razón al Consistorio, que, eso sí, habrá de devolver la cantidad que AIDE había abonado: 314.600 euros.

¿Pero qué es exactamente AIDE Federation? Su nombre completo, según figura en la propia sentencia, es 'Federation des Agences Internacionales Pour le Developpemment. Federation de AIDES'. Esta fundación quería implantarse en España y había elegido Granada, Casa Ágreda, para establecer una delegación en el país. Esta organización, como figura en la documentación judicial que maneja este diario, «agrupa asociaciones internacionales de ayuda humanitaria y al desarrollo con vocación social, cultural, filantrópica, de carácter apolítico e implantación en numerosos países». El domicilio social de AIDE está en el número 29 de la calle Traversiere de París y, entre sus objetivos, figuran llevar acciones a favor del respeto de los derechos de las personas y de la democracia o participar en proyectos de desarrollo y en campañas que luchan contra la pobreza, las drogas, el racismo...

Fue M. N. M., un voluntario de esta oenegé, quien actuó en su nombre sin ostentar representación legal de signo alguno. Este hombre es uno de los ocho investigados en el capítulo penal de Casa Ágreda, junto al exalcalde José Torres Hurtado (PP) y la exedil de urbanismo, Isabel Nieto. Se ha visto inmerso en la causa como representante de AIDE en Granada, aunque realmente no lo es. Simplemente hizo las veces de «mandatario verbal de AIDE» cuando se estaba tramitando la cesión finalmente frustrada. Él mismo se llegó a identificar como responsable de Relaciones Institucionales en España de esta organización, de la que en 2016 dijo que estaba avalada por Naciones Unidas, que tenía delegaciones en once países, y actuaciones y contratos de colaboraciones en treinta y cuatro países más.

AIDE visitó en 2014 el palacete después de tener constancia de que no estaba siendo utilizado desde que en el año 2007 las hermanas de la Divina Infantita lo abandonaran. Tras aquella visita, la oenegé consideró que el edificio –que está catalogado y goza de protección– podía albergar su delegación permanente aquí, así como un centro social y cultural.

La ONG envió entonces una carta al primer edil de Granada. En su escrito, fechado el 14 de marzo de 2014, reflejaba el compromiso de la fundación de crear distintos espacios. Entre ellos, proyectaba impulsar –según recoge uno de los autos judiciales consultados– un «hogar de acogida, un espacio dedicado a la mujer en situación monoparental o víctima de violencia de género». También preveía una «guardería infantil para la atención de los hijos de las mujeres acogidas en el centro» y pretendía crear «un banco de alimentos y vestido», aparte de «un centro de formación lingüística para la inserción de emigrantes, con talleres formativos para facilitar el acceso al mercado laboral».

IDEAL ha consultado la web que aparece a nombre de AIDE Federation y el perfil de esta oenegé en Facebook. La última publicación que aparece en la citada red social en público es del 8 de marzo de 2016, con motivo de la celebración del Día Internacional de la Mujer y se ve a un grupo de personas en Ginebra con una pancarta en francés. En su web (aide-federation.org) la fundación se identifica como «un grupo internacional de asociaciones sin fines de lucro cuya misión es contribuir incluso modestamente a las numerosas acciones emprendidas por los organismos especializados de las Naciones Unidas y las Naciones Unidas». La mayoría de los artículos e informes publicados son antiguos, de hace años. En la propia web se identifica como presidente de AIDE a El Hakkaoui Addekbir.

El contrato que ahora se ha resuelto y que firmaron AIDE y el gobierno de Torres Hurtado fue, según precisó en uno de sus autos el juez que instruye la causa penal, «un derecho de superficie por un precio de 260.000 euros incrementados en el IVA correspondiente y con opción de compra, abonando 1.637.638'42 euros, pero que exigía en todo caso el desembolso mínimo de la suma de 4.959.519 euros en un plazo de cinco años para acometer las necesarias obras de conservación y rehabilitación».

El paso del tiempo y la inactividad están acelerando el deterioro del edificio, como ha venido denunciando 'Vamos, Granada', que está personada en la causa penal a través de Marta Gutiérrez. Fue ella quien pidió al juez que tendrá que escribir el desenlace en la vía penal, el magistrado José Luis Ruiz Martínez, que investigase a esta fundación por presunto blanqueo de capitales, a la vez que advertía de que su actividad estaba concentrada en Marruecos. Solicitó incluso que se reclamara información bancaria –al Banco Marroquí de Comercio Exterior y al Banque Chaabi du Maroc- y que investigara el patrimonio de AIDE. El juez lo denegó.