Noel López supo perder

Noel admite cuatro años después que aquellas primarias fueron una lección; de la que más ha aprendido en política. Y eso que desde sus inicios anduvo sobre turbulencias, cuando Paco Álvarez de la Chica lo escogió para intentar reconstruir una agrupación local que estaba hecha trizas. En este tiempo, se quitó del escaparate, revalidó la mayoría absoluta en Maracena y moduló sus aspiraciones. Incluso, había decidido no volver a presentarse a otras elecciones municipales y, si no surgía otra alternativa, regresaría a su puesto de trabajo en Diputación.

Pero llegaron las primarias del PSOE de Andalucía. El 12 de mayo Susana Díaz visitó Maracena y se reunió con más de 150 militantes. Noel López estuvo en el acto, pero no intervino. La expresidenta de la Junta probablemente contaba con el apoyo de su viejo amigo en las Juventudes Socialistas; igual que Noel pensó que Susana lo apoyaría cuando se postuló en 2015 para presidir la Diputación o en 2017 para dirigir el partido en Granada. 24 horas después llegó Juan Espadas y, en esta ocasión, el alcalde de Maracena se fotografío dando su aval al alcalde de Sevilla.

No había nada cerrado entre ambos. Noel solo le pidió que, si finalmente era el nuevo secretario general, pusiera una persona de contacto que le cogiera el teléfono. Iba a ser él mismo.

Espadas ha premiado la lealtad al partido pese a la derrota y su trayectoria municipalista. No existía tampoco una relación estrecha previa entre ambos, como sí se da con el parlamentario Gerardo Sánchez o con Manuel Pezzi, elegido para presidir el PSOE andaluz. En la ejecutiva también estará el diputado José Antonio Rodríguez Salas, persona del entorno de Pedro Sánchez.

Nunca antes hubo tanto poder granadino en San Vicente, la sede del partido en Sevilla. En la ejecutiva que se aprobará hoy, el número dos lo ocupará formalmente la nueva vicesecretaria, la jienense Ángeles Férriz. Pero Noel López, como secretario de Organización, será quien asuma toda la estrategia electoral a tan solo unos meses –un año a lo sumo– de las elecciones autonómicas. Eso le obligará a instalarse en Sevilla y a dejar –no a cortísimo plazo– la alcaldía de Maracena.

La portavoz del PP en La Zubia y hasta hace unos meses alcaldesa del municipio, Inmaculada Hernández, emplazó esta semana a sus vecinos a acudir al pleno en señal de protesta por una futura –dice– subida en el recibo del agua del 400%. El motivo –continúa– es la cesión de las competencias al consorcio Sierra Nevada Vega Sur, que aplicará sus tarifas. El gobierno municipal niega esta afirmación, sumida en un rifirrafe político como otro cualquiera.

Lo curioso de esta llamada contra los precios del consorcio es que este organismo lo preside la alcaldesa de Las Gabias –también del PP–, María Merinda Sádaba, y gestiona el agua de 16 municipios; entre ellos, el pueblo donde es alcalde el presidente provincial de los populares (Alhendín).

Inmaculada Hernández concentró a la puerta del Ayuntamiento de La Zubia el jueves medio centenar de personas. Sujetaron una pancarta donde se podía leer: «No a la cesión del agua». Quizás por el envés se completara la frase: «No a la cesión del agua… a Meri». Pero esto no es más que una maldad o una coincidencia.