El 'nexo granadino' fundó una constructora propia antes de que lo despidieran

El principal nexo con la rama granadina, Fernando M., inició sus contactos con Koldo García en el año 2015, cuando era directivo de Acciona en Navarra. La empresa ya ha confirmado que lo despidió en 2021. Poco antes de esa extinción, Fernando M. fundó su propia empresa, que domicilió en su casa de Huétor Vega. Ese domicilio es uno de los que se registró el 10 de junio.

Mer Construcción y Mantenimiento SL, que cuenta con Fernando M. como administrador único, se fundó con un capital social de 3.000 euros el 24 de febrero de 2020 y fue objeto de una ampliación de capital en marzo de 2025, por importe de 35.000 euros más. La empresa pasó de no tener trabajadores fijos en su primer año de actividad, a tener 10 no fijos en el año 2021, 19 fijos en el año 2022 y 22 empleados indefinidos en el año 2023. Un crecimiento exponencial.

La actividad de la compañía, sobre el papel, también tiene un crecimiento rápido. En el año 2023, según las cuentas presentadas en el Registro Mercantil por la empresa, a las que ha tenido acceso este periódico, su material inmovilizado (el patrimonio de la firma), pasó de 10.359 euros, a cerrar el año 2023 con 84.298 euros, arrojando un patrimonio total de 234.315 euros. Gran crecimiento para una pyme en apenas dos años. El volumen de negocio de la empresa oscila de forma notoria. En el año 2020 apenas ingresaron 20.000 euros, al siguiente ejercicio subieron hasta 1.517.510 (2021), bajaron a 708.515 en el ejercicio posterior (2022) y en 2023 volvieron a subir a 1.206.246.

Mención aparte merece la actividad conocida. Es decir, qué obras consta que ha ejecutado. Y aquí es donde permite trazar de nuevas las vinculaciones de la empresa con distintas 'ramas' del caso Koldo.

Comportamiento inestable

En el registro de su vivienda en Huétor Vega, que a su vez es el domicilio social de la empresa, se encuentra documentación de distintas obras. Entre ellas, una reparación de naves en Santa Fe, trabajos del metro de Málaga, obras de la Circunvalación Sur de Motril, trabajos en la N-322 y otras en la A-32, en el tramo de Úbeda a Torreperogil, (que son de las que están bajo sospecha de la UCO, adjudicadas a OPR) y otros trabajos a otras mercantiles.

La UCO investiga la obra de la autovía A-32, donde el sobrecoste es de cinco millones de euros. El exdirector general de carreteras, Javier Herrero, autorizó en octubre de 2019 la modificación del proyecto. El adjudicatario en solitario era OPR. La obra total se calculaba en más de 75 millones de euros.

Medió en la modificación

Los investigadores hacen hincapié en ese expediente de modificación de contrato porque se incluyen los aspectos que le había destacado Fernando M. a Koldo. Este sujeto fue interlocutor en defensa de los intereses de OPR, a través de los que luego él habría conseguido supuestamente contratos para su propia empresa.

De hecho, en los registros la UCO encontró documentación donde Mer Construcción y Mantenimiento era cliente de OPR.

Previamente, la UCO halló además en uno de los móviles de Koldo un mensaje que decía «Úbeda a Torreperogil aprobar el modificado ya y como viene y es de OPR». Unos meses después, Fernando M., el cuñado, envió a Koldo una imagen del proyecto de modificación, acompañado de varias indicaciones.

El cuñado llega incluso a quejarse al exasesor de que un funcionario le estaría pidiendo aclaraciones y le reclamaba a Koldo que no se olvidara del asunto. Preguntado por este asunto tiempo después, Koldo aseguró que ya estaría «hecho»Así hasta que se produjo la modificación.