La narcolancha varada en Salobreña iba sin droga y la tripulaban dos jóvenes
La embarcación, que apareció abandonada en la playa de La Guardia, fue confiscada por la Guardia Civil tras ser alertada por los vecinos
Un misterio encalló en la conocida playa de La Guardia, un anejo del municipio de Salobreña, la noche el pasado sábado. Los vecinos se toparon ... con una narcolancha varada en la bahía granadina. La embarcación, de diez metros de eslora y con dos potentes y costosos motores fueraborda, había sido abandonada en la pedregosa arena. Sin motivos aparentes, nadie les perseguía ni parece que existiera riesgo de naufragio, los traficantes se habían desprendido de unos cuantos miles de euros en la Costa de Granada. Una decisión tan ruinosa como extraña.
Era el primer capítulo de un enigma que, presumiblemente, tardará en resolverse..., si es que alguna vez se resuelve. Las preguntas se acumulan y las respuestas se hacen de rogar. ¿De dónde venía la narcolancha? ¿Hacía dónde iba? ¿Cuál era su misión, si es que tenía alguna? ¿Por qué la 'zodiac' embarrancó en la recoleta playa de La Guardia?
Por el momento, lo único claro es que la embarcación no llevaba droga, según confirmaron a IDEAL fuentes de la oficina de comunicación de la Guardia Civil de Granada.
Conjeturas
Y una segunda certeza: la lancha, según los testigos que alertaron a la Benemérita del desembarco, iba tripulada por dos jóvenes que, nada más tocar tierra, pusieron pies en polvorosa y se perdieron en la noche.
A partir de aquí, todo son conjeturas y suposiciones. Y, por supuesto, un enjambre de incógnitas. La playa de La Guardia no es precisamente una cala recóndita y secreta, que son las que eligen los narcos para descargar la mercancía. Al contrario, hay viviendas y chiringuitos en primera línea.
Tampoco la hora parecía la más adecuada: las doce de la noche. Lo normal es que estas operaciones se lleven a cabo ya bien entrada la madrugada.
Sea como fuere, la Guardia Civil mantiene abierta la investigación que inició el pasado sábado para localizar a los marineros clandestinos. Fueron unos lugareños los que avisaron a la Benemérita tras toparse con la embarcación encallada en la orilla.
Nada más tocar tierra, los dos marineros clandestinos pusieron pies en polvorosa, según los testigos del suceso
En este sentido, el Servicio Marítimo de la Guardia Civil remolcó la 'zodiac' hasta el puerto de Motril para someterla a un examen exhaustivo y tratar de hallar indicios que conduzcan a la identificación de los supuestos narcos.
Las pesquisas han servido para determinar que no había rastro de estupefacientes a bordo.
Se da la circunstancia de que, a finales del pasado mes de marzo, se produjo un incidente calcado en la playa de los Yesos, en el término municipal de Sorvilán, también en Granada. La Guardia Civil encontró una embarcación semirrígida de doce metros de eslora que estaba equipada con tres motores y que portaba garrafas de gasóleo.
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