Fallece Federico Mayor Zaragoza, exministro y exrector de la UGR

Nacido en Barcelona en 1934, su trayectoria ascendió con una rapidez inaudita incluso para la época. Fue doctor en Farmacia por la Universidad Complutense de Madrid en 1958, lo que consiguió con premio extraordinario. En aquella época estaba ligado al magisterio de Ángel Santos Ruiz, uno de los científicos más relevantes del momento y figura esencial en la historia de la bioquímica del país.

Mayor Zaragoza aprovechó los años siguientes para extender su formación en el extranjero. Especial relevancia tiene la estancia en Oxford, donde formó parte del laboratorio del alemán Hans Adolf Krebs, descubridor del ciclo del ácido cítrico de los mamíferos, lo que le valió para ser galardonado con el Premio Nobel de Fisiología en 1953.

En el 63, siendo ya una de las personalidades preeminentes de su especialidad, Mayor Zaragoza ganó la plaza de catedrático de Bioquímica de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Granada. Su ascensión meteórica, sin embargo, no se detuvo tras su llegada a la capital nazarí, ciudad con la que conectó de inmediato gracias a su personalidad arrolladora y su profundo amor por la cultura. Apenas tardó un lustro en ser designado máximo responsable de la institución académica, lo que supuso un nuevo hecho extraordinario. Tenía 34 años, lo que lo convirtió en el rector más joven del país en siglos de historia.

Su etapa al frente de la Universidad destacó por su tendencia a ir más allá de los límites prefijados, esa mirada expansiva, amplificadora, que buscó recuperar la posición preeminente de Granada en el panorama educativo nacional. A él se debe la celebración en España del Congreso de la Federación Europea de Sociedades de Bioquímica, un evento internacional que atrajo la atención de grandes personalidades como Severo Ochoa, Carl Cori o Hans Adolf Krebs, con quien volvió a coincidir tras su etapa en Oxford, en un momento en el que las potencias mundiales seguían mirando de reojo al país por la dictadura.

La época granadina se cerró en 1972, cuando dio el salto a Madrid como catedrático de su especialidad en la Universidad Autónoma. Fue en esa etapa cuando Mayor Zaragoza empezó a compaginar la educación con la política, otra de sus pasiones. Mientras lideraba iniciativas como el Centro de Biología Molecular 'Severo Ochoa' de la mano del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, el dirigente adquiría responsabilidades de Estado como Subsecretario de Educación y Ciencia, cargo desde el que promovió un plan nacional de prevención que favoreció el diagnóstico de enfermedades mentales.

Con la llegada de la democracia, Mayor Zaragoza se convirtió en una de las figuras de relumbrón de los primeros gobiernos. Fue diputado de la Cámara Baja y consejero de presidencia de Adolfo Suárez entre 1977 y 1978. Ese año saltó al campo internacional como director adjunto de la UNESCO, cargo que abandonó en 1981 para ocupar el Ministerio de Educación y Ciencia entre 1981 y 1982, bajo el gobierno de Leopoldo Calvo-Sotelo.

La llegada de Felipe González a la presidencia del Gobierno no supuso un freno a su relevancia. Su prestigio y capacidad le hizo acreedor de la dirección general de la UNESCO, papel que desempeñó con gran éxito durante 12 años hasta 1999.

Con la entrada del nuevo siglo, Federico Mayor Zaragoza no abandonó sus costumbres y se convirtió en una figura crucial tanto a nivel nacional como internacional, sirviendo de asesor en buena parte de las iniciativas españolas en el campo cultural y científico. El vínculo con Granada, además, no se quebró. En 2017, con 83 años, dio muestras de su amor por la ciudad y por la institución académica que dirigió en los 60 al ceder parte de su legado, compuesto por más de 18.000 volúmenes y cientos de piezas artísticas, a la biblioteca de la nueva facultad de Ciencias de la Salud, que desde entonces lleva su nombre. También formaba parte de la comisión encargada de la candidatura de la capitalidad cultural de Granada para 2031, labor en la que permaneció activo hasta sus últimos días.

Con su muerte, el país pierde a un 'pionero' de la libertad en los tiempos oscuros, una de las personalidades sin las que es posible comprender la historia de las últimas seis décadas en campos como la política, la ciencia, la investigación o la cultura.

La Universidad de Granada (UGR) lamenta profundamente el fallecimiento de Federico Mayor Zaragoza, quien fuera rector de la Universidad de Granada entre los años 1968 y 1972, catedrático de Bioquímica de esta institución, ex ministro de Educación y Ciencia y ex director general de la UNESCO.

El rector de la UGR, Pedro Mercado, ha destacado «el importante papel que desempeñó Mayor Zaragoza como rector de nuestra institución en momentos absolutamente trascendentales para la gestión de la UGR», y señala que Mayor Zaragoza «era una gran persona, un gran intelectual y un científico de gran altura, que ha brillado en todos aquellos lugares dentro y fuera de la UGR donde ha desempeñado su labor. Es ese espejo en el que siempre deberemos mirarnos».

En 2017 Mayor Zaragoza donó a nuestra institución un importante archivo bibliográfico formado por más de 19.000 libros, archivos y obras de arte, que desde entonces constituyen la Biblioteca «Mayor Zaragoza», ubicada en la planta baja de la Biblioteca del Parque Tecnológico de la Salud (PTS).

En los últimos tiempos, Federico Mayor Zaragoza trabajaba muy activamente dentro de la Comisión institucional para la conmemoración del V Centenario de la Universidad de Granada, que tendrá lugar en 2031, «y en ella seguía defendiendo como siempre había hecho esos valores tan importantes para la UGR como la educación, la paz y los derechos humanos», ha afirmado Mercado.

La UGR quiere trasladar sus más sinceras condolencias a la familia y amigos de Federico Mayor Zaragoza, y a todas aquellas personas que tuvieron el privilegio de conocerlo y trabajar con él.