Huétor Tájar, Salar, Moraleda de Zafayona y Villanueva Mesía no abrirán sus piscinas este verano

Según los representantes de la Mancomunidad, «las duras condiciones impuestas por las autoridades sanitarias, a la vez que necesarias, resultan esencialmente incompatibles con la naturaleza del propio servicio, dado que las piscinas recreativas se caracterizan por su ambiente de juego, relajación y convivencia». Para estos cuatro ayuntamientos del Poniente Granadino, «todo ello hace técnicamente muy difícil garantizar el cumplimiento de estas medidas».

Entre la condiciones que se plantean para las piscinas públicas en este momento de la pandemia están una considerable disminución del aforo, por exigencia del distanciamiento social tanto en zona de baño como de descanso, así como la prohibición de toda actividad recreativa en ambas zonas y la exigencia de que los niños menores de 14 años permanezcan dentro del espacio ocupado por la unidad familiar. «Por eso, tras un estudio responsable de las condiciones higiénico-sanitarias a cumplir, y anteponiendo por encima de cualquier otra cosa la salud de nuestros vecinos, hemos decidido que permanezcan cerradas este verano», indican estos cuatro ayuntamientos.

Como recuerdan desde la Mancomunidad, las autoridades sanitarias (tanto del Gobierno de España como de la Junta) han elaborado sendas 'Guías para la protección de la salud en la reapertura de piscinas', que recogen «estrictas medidas higiénico sanitarias vertebradas en torno a tres puntos clave: distanciamiento, higiene de manos y respiratoria y desinfección». «Por ello, pese a lo doloroso de la decisión, hemos entendido que la opción más responsable pasa porque dichas instalaciones permanezcan cerradas durante este verano», apuntan sobre una decisión que ya han tomado más de 30 municipios de la provincia.