«Si llega a saltar una chispa a los coches o las casas nos habrían tenido que desalojar»
Los vecinos cuentan cómo vivieron el incendio el sábado en el Convento Hijas de la Caridad, gestionado por la ONG Movimiento por la Paz
El olor a quemado aún impregna el acceso principal al Convento Hijas de la Caridad, en la calle José Tamayo. Los pinos que cubrían las ... rejas de la fachada izquierda han desaparecido y ,ahora, algunos restos de ramas completamente calcinadas han ocupado su lugar. Los viandantes pasean por el entorno y se preguntan –extrañados– qué ha ocurrido. Algunos vecinos alertaron de lo sucedido la madrugada del viernes al sábado, cuando llamaron a los bomberos al ver las llamas. «Si llega a saltar una chispa a los coches o las casas nos habrían tenido que desalojar», dice Loli, con un atisbo de miedo y preocupación en su rostro. La avenida principal se sitúa a solo un metro de distancia y, al cruzar la calle, hay un edificio tras otro, lo que justifica el temor de sus ciudadanos.
El suceso ocurrió alrededor de las 2.55 de la mañana y hasta allí se desplazaron efectivos de Bomberos y Policía Local de Granada, que cortaron el tráfico para actuar sobre el fuego. El hollín al que quedó reducido la vegetación abrasada cubre todavía la acera. Los gestos de desconocimiento de quienes pasan por el lugar se repiten, al tiempo que lamentan lo que se ha perdido por la historia y la importancia patrimonial que alberga el recinto. Según el relato de los vecinos, las monjas vivieron en el convento hasta hace dos años. Desde entonces, las instalaciones habían estado cerradas.
Sin saber el origen
Desconocen si el incendio estuvo causado y si se inició desde el interior o el exterior de las instalaciones, pero les preocupa lo sucedido y denuncian que nadie les ha avisado ni les ha trasladado ninguna información acerca del nuevo uso del convento. «Vemos entrar y salir furgonetas constantemente, descargar comida y a extranjeros en el lugar», expresan. Los ciudadanos de la zona percibieron movimiento en las inmediaciones hace poco menos de un mes. «No estamos en contra de que en este lugar se atienda a personas extranjeras, pero queremos que alguien nos informe de ello», reclaman los ciudadanos. Desde la asociación de vecinos de la Avenida Cervantes indican que son conocedores del incendio y reconocen que hay «inquietud» por esta situación.
Desde la ONG Movimiento por la Paz aseguran que ellos gestionan actualmente las instalaciones a través de un convenio con el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones dentro del marco del Programa de Atención Humanitaria, que presentaron la correspondiente denuncia a la Policía Nacional y que avisaron a la jefatura de Policía de Distrito del Ayuntamiento de Granada del suceso. Aclaran que se encargan de atender las necesidades básicas de estas personas, como alojamiento y manutención, y de la integración social y la autonomía de personas migrantes en situación de vulnerabilidad, que va desde la asesoría jurídica a la orientación laboral.
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