Juana Rivas se expone a una orden de detención si no comparece hoy ante el juez

Juana Rivas, la vecina de Maracena que permanece en paradero desconocido con sus dos hijos menores desde el 26 de julio, se expone a una orden de detención si hoy no acude a su cita con la Justicia. Según informaron a IDEAL fuentes judiciales, su comparecencia está fijada a las 10.30 horas en el Juzgado de Instrucción 2 de Granada, que se halla en el edificio judicial de la Caleta.

Las mismas fuentes precisaron que Juana está citada «como investigada» por «un posible delito de sustracción de menores en su modalidad de retención ilícita», por llevarse consigo a los dos pequeños, de 3 y 11 años, y desvanecerse con ellos incumpliendo la orden judicial de entregarlos a su padre, residente en Italia.

La mujer habrá de declarar únicamente sobre este hecho -y no sobre otro- ante el juez que sustituye en este período veraniego a la jueza titular de ese órgano judicial, que es María Ángeles Jiménez. También habrá de presentarse en el juzgado Francesco Arcuri, padre de los menores, a fin de «ratificar la denuncia».

De este modo, si Juana persiste en su postura y no comparece se arriesga a que el magistrado, «con toda probabilidad», dicte «un auto de detención y presentación», dado que es lo que «habitualmente» sucede cuando se produce una incomparecencia de este tipo. El paso siguiente tras dicha orden de busca y captura será que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad procedan a localizarla para llevarla ante el juez.

En caso de que sí comparezca, las fuentes indicaron que será interrogada sobre los motivos del incumplimiento y deberá facilitar al juzgado la dirección donde se encuentran los niños, al objeto de dar cumplimiento a la ejecución de la sentencia del Juzgado de Primera Instancia 3 -luego ratificada por la Audiencia-, que es el juzgado de Familia que ha tramitado el caso por lo civil y que dispuso que Juana debía devolver los niños a su padre para retornar a su país.

Fue en mayo de 2016 cuando la mujer, que tiene a su familia en Maracena, vino a España para pasar unas vacaciones con sus hijos y decidió no volver a Italia, denunciando en julio haber sido víctima de presunta violencia de género por parte de su pareja. Arcuri, por su parte, ha negado ser un maltratador. El hombre aceptó 3 meses de prisión en 2009 por haber golpeado a Juana una noche.

Las fuentes agregaron que en caso de incomparecencia, el juez pedirá un informe al fiscal antes de decidir si dicta el auto de detención. Este diario contactó ayer con María Castillo Pozo, abogada de oficio de Juana en el proceso civil, quien dijo no tener constancia de ningún tipo de designación ni por el Colegio de Abogados ni por el juzgado para asistir hoy, en esta causa penal, a la mujer.