Un joven se atrinchera con un arsenal en su casa de Peligros
El arrestado tenía decenas de armas en su vivienda y fue detenido por agentes de la Policía Local y la Guardia Civil tras una negociación de tres horas
La casa parecía la armería de un cuartel militar. Las paredes estaban cubiertas de pistolas, fusiles (simulados o fabricados artesanalmente), catanas, munición, machetes..., que alternaban ... con trofeos de caza y vestimentas militares.
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Eso fue lo que se encontraron ayer los agentes de la Policía Local de Peligros cuando entraron en la vivienda de un vecino del municipio del Área Metropolitano que, al parecer, había efectuado varias detonaciones con una de las armas de su arsenal. Ocurrió a las siete de la mañana y, según fuentes policiales, no era la primera vez que el hombre en cuestión llevaba a cabo una acción de ese tipo. La Policía Local pidió la colaboración de la Guardia Civil, que de inmediato envío a varias patrullas a Peligros. Entre unos y otros establecieron un cerco alrededor del domicilio del joven, que se mostraba notablemente alterado.
La Policía Local fue al domicilio después de que el sospechoso efectuase varias detonaciónes
Tras el primer contacto, las fuerzas de seguridad y el sospechoso iniciaron una tensa negociación que se prolongó durante unas tres horas. Un tira y afloja en el que los agentes de la Policía Local de Peligros y los de la Benemérita se esforzaron para calmar, en la medida de lo posible, al alborotador. El paso siguiente fue convecerlo para que saliese de la casa y se entregase.
El diálogo surtió efecto y el joven atrincherado desistió. No obstante, al abandonar el inmueble llevaba colgado del cinturón un machete, según indicaron a IDEAL los medios consultados. Pero no hizo ademán de utilizarlo y, acto seguido, fue detenido.
Aún quedaba un último gesto de violencia que dirigió contra sí mismo. Los agentes lo introdujeron en el interior de uno de sus vehículos y el arrestado, supuestamente, se golpeó la cabeza con una de las lunas del coche, lo que le produjo una hemorragia en la cabeza. Finalmente, y tras una primera cura, pudo ser conducido a dependencias de la Guardia Civil. El notable despliegue policial no pasó desapercibido para los vecinos de Peligros, que asistieron expectantes al desenlace del incidente.
En la casa había varias plantas de cannabis que eran para el consumo personal del detenido.
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