Investigan un caso de presunto acoso laboral en una empresa farmacéutica de Granada
Un juzgado madrileño cita declarar a la empleada denunciada por el supuesto hostigamiento sufrido por una técnico de laboratorio que pidió conciliar
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Pozuelo de Alarcón (Madrid) investigará un posible caso de presunto acoso laboral contra una empleada ... de la fábrica de Granada de una empresa farmacéutica. La mujer, técnico de laboratorio, pidió el año pasado una reducción de jornada para cuidar de su hija pequeña y, aunque le fue concedida, llevó a la empresa a los tribunales porque le fue denegada la adaptación de la jornada que igualmente había solicitado.
A través de un auto, dictado el pasado 5 de abril y al que ha tenido acceso IDEAL, el citado órgano judicial incoa diligencias previas contra la empresa farmacéutica por un posible delito contra los derechos de los trabajadores, así como contra la trabajadora denunciada por la supuesta víctima.
En la resolución, que podría ser recurrida, el órgano cita a la denunciada para que declare como investigada el próximo 22 de junio. Ese mismo día, también ha pedido a la denunciante, cuyo abogado es Nicolás Martín, que comparezca para que preste testimonio como perjudicada y ofrecerle ser parte en el procedimiento.
Este diario ha podido consultar la denuncia de la supuesta víctima, que fue contratada por la empresa a comienzos del año pasado. Al tener una menor a su cargo, la mujer solicitó ese verano una reducción y adaptación de jornada para poder conciliar. Fue el 25 de julio cuando lo pidió mediante burofax. Exactamente solicitó una reducción de 1,5 horas, con horario de 7:45 a 14:15 horas.
La respuesta de la empresa, según la denuncia, llegó el 8 de agosto. La entidad aceptaba la reducción, «pues no existía otra posibilidad por ley», pero le negaba la adaptación «sin ninguna justificación». «Además, no se planteaba ninguna alternativa o solución y se ocultaba información», sostiene la denuncia.
Anulación
A partir de dicho momento, los denunciados adoptaron presuntamente una conducta de persecución y hostigamiento contra la denunciante, «que provocó su anulación personal y profesional en su puesto de trabajo».
«La actitud y los hechos con que la empresa respondió a la solicitud de conciliación familiar muestran una notoria situación de violencia psicológica que además se han hecho extensiva al resto de compañeros del departamento», señala la denuncia.
Y es que estos, supuestamente por indicaciones de la denunciada, habrían comenzado «a hostigar» a la mujer, «que pese a ejercer un derecho fundamental se ve perseguida».
Entre otras actuaciones, siempre según la denuncia, la técnico sufrió un «cambio de funciones» al regresar de sus vacaciones, siendo presuntamente relegada a realizar tareas administrativas, como escanear o pasar datos a Excel.
De igual modo, la denuncia sostiene que querían quitarle el turno de guardias «a los meros efectos de causarle un quebranto económico». Todo lo acontecido ha provocado a esta empleada «un trastorno ansioso que le incapacita para trabajar».
Este diario ha tratado de recabar la versión de la empresa, sin que finalmente haya obtenido un pronunciamiento. La denunciante pedía que se impusiera una fianza a la denunciada de 24.000 euros.
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