Helicópteros y drones se unen contra los robos en el campo en Granada
La Guardia Civil refuerza el control en los puntos de compra de aceituna y la colaboración con el sector para prevenir y esclarecer los delitos
El daño que hacen los robos de aceituna en el campo van mucho más allá del valor económico, que esta campaña será más alto que ... nunca. Y es que las prisas y las malas prácticas que utilizan los ladrones para recolectar la aceituna destrozan el tallo de árbol y comprometen también las cosechas futuras. Los investigadores de los equipos ROCA de la Guardia Civil, la unidad especializada en robos en el ámbito rural, son plenamente conscientes de la preocupación de los agricultores en esta campaña, marcada por el alto precio del aceite. Están con ellos todos los días, conocen bien su inquietud y están intensificando la labor pedagógica y preventiva a pie de campo para enseñarles a que «no se lo pongan fácil» a los ladrones. Pero además, en esta campaña donde el riesgo se extrema por el efecto llamada que provoca el elevado precio de la aceituna, los equipos Roca están más preparados y vigilantes que nunca. La Comandancia de la Guardia Civil de Granada ha puesto toda su maquinaria al servicio de la orden denominada 'Procedimiento de actuación para la campaña olivarera 2023/24', que involucra a todos los grupos especializados.
Más de un millar de agentes de las distintas unidades estarán preparados para trabajar en las labores preventivas de robos y al servicio de las investigaciones que dirigirán los grupos ROCA y se desplegará un fuerte dispositivo que incorporará la vigilancia con drones de la Unidad Pegaso y los vuelos preventivos de helicópteros de la Unidad Aérea en la vigilancia de la extensa red de caminos.
Los agentes del Seprona, con la agilidad y utilidad de sus motos eléctricas que no hacen ruido para moverse por el campo, o las unidades de tráfico para controlar las carreteras y las vías de escape son otras de las unidades que apoyarán la campaña.
La Guardia Civil reforzarán el control del transporte y de los lugares de entrega donde no existe la obligación de ser cooperativista, que son por donde habitualmente se 'cuela' la aceituna sustraída.
Además incrementará la colaboración con las policías locales, seguridad privada y guardas rurales de los cotos. «Este es un trabajo de todos, desde la Guardia Civil hasta el último peón que trabaja en la finca, es fundamental que recopilen cualquier información que les parezca sospechosa, que no tengan miedo de contactar con nosotros porque cualquier dato, matrícula o grabación puede ser importante para esclarecer los hechos y para ayudar en la labor preventiva», subraya el teniente Lucas Barrientos, portavoz de la Guardia Civil. Su misión es dar tranquilidad al sector y subraya que, pese a las dificultades que entrañan estas investigaciones –no se le pueden poner puertas al campo– el índice de esclarecimiento de los casos del grupo ROCA es muy alto.
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