La fiesta del Zalabí vuelve a Exfiliana después de tres años

A ella no solo acuden sus ciudadanos, sino que también lo hacen a pie, como marca la tradición, otros procedentes de Guadix o Jerez del Marquesado, cuya cofradía hizo un encuentro con la imagen de la Virgen para procesionar junto a ella por el entorno. «Para la gente que lo vive desde pequeño, volver a celebrar la fiesta del Zalabí después del parón por la pandemia ha sido uno de los momentos más esperados. Supone una tradición no solo en el municipio, sino también en las familias que, generación tras generación, llevan a sus hijos y nietos para disfrutar de la romería», afirma Mercedes Porcel, una de las vecinas del municipio.

Al grito de «¡viva la Virgen de la Cabeza!», la explanada de la ermita volvió a llenarse, después de tres años, de vida y de gente que el día anterior había subido a última hora del día a entregar las velas a la imagen. Tras la Virgen, caminaban los habitantes de Alcudia y Exfiliana, mientras que esta era arrastrada por dos bueyes por las calles del municipio hasta su llegada al lugar de reunión, donde culminaron la festividad