«Se debería pensar seriamente en tener una Ciudad de la Justicia en Granada»
Miguel Ángel Reyes, director general de Infraestructuras Judiciales y Sistemas de la Junta ·
El responsable de las obras en las sedes de los juzgados andaluces cree que la remodelación de las tres plantas vacías de Caleta estará acabada para finales de 2021La obra para dar uso al espacio vacío que quedaba aún en la parte central del edificio judicial de la Caleta acaba de salir a ... licitación hace unos días. Se anunció hace cuatro años y por fin parece que se va a ejecutar. Mientras tanto, la vida en los juzgados de Granada sigue su curso en un complejo que la Junta de Andalucía admite que se ha quedado pequeño para albergar todos los órganos unipersonales de la urbe. Así lo reconoció ayer a IDEAL, antes de asistir a la inauguración oficial del nuevo juzgado de Familia creado por el Ministerio de Justicia en la capital, el director general de Infraestructuras Judiciales y Sistemas de la Consejería de Justicia, el arquitecto Miguel Ángel Reyes Tejada (Málaga, 1978). Al final habrá que buscar «un plan b».
–¿Cuándo calcula que podrán comenzar las obras en Caleta?
–Se acaba de publicar la licitación y finaliza el plazo el 29 de septiembre. A partir de ahí, un par de meses para que se elija la empresa y se formalice el contrato, y luego otro par de meses más hasta que la empresa seleccionada adquiera todos los permisos necesarios para comenzar. La actuación tiene un período de 12 meses. Yo creo que a finales de 2021 las tres plantas de Caleta pueden estar completamente finalizadas y en uso.
–Esta actuación se proyectó con el anterior gobierno autonómico... ¿Por qué tanta demora?
–Han venido a sumarse dos factores. Por un lado, estaba la parte puramente técnica del proyecto. Lo hemos tenido que revisar muy asiduamente, pues se trata de unas obras que son específicamente de instalaciones que tienen que ver con la climatización, la ventilación y la protección contra incendios y evacuación de personas en su caso. Todas estas instalaciones no son fáciles en un edificio eminentemente administrativo que ya está en carga. Por otro lado, la pandemia paralizó los trámites administrativos.
–¿Qué irá en cada planta?
–La sexta y la séptima plantas albergarán un total de seis juzgados. En la planta octava, irán la sala de reuniones, la de juntas y dependencias más administrativas. Seremos capaces de traer seis juzgados de Plaza Nueva de los diez previstos; cuatro seguirán allí. Pero bueno, la realidad es que una vez que nos ponemos manos a la obra y tiramos metros, como decimos en nuestro mundillo, cabe lo que cabe, y haremos espacios dignos. Anteriormente sí podías agrupar más el mobiliario, pero con las condiciones actuales de distanciamiento social, hay que hacer las cosas más esponjadas, más espaciosas.
–¿Cuáles son esos seis juzgados?
–Esa planificación la tenemos que terminar de cerrar, porque tenemos que tener en cuenta que viene un nuevo 'juzgado Covid' aquí y que no podemos contar con el edificio de Caleta 13 (Delegación de Salud) que formaba parte antes de lo que era el ideal de Ciudad de la Justicia. Por tanto, todo el engranaje que se había puesto en marcha salta por los aires.
–¿Por qué se descartó el edificio de la Delegación de Salud?
–Cuando llegamos, nos encontramos con un edificio que pretendíamos rehabilitar para entrar nosotros. Pero a mediados del año pasado nuestra sorpresa fue que Patrimonio nos advierte de que Salud no sale así como así. Nos encontramos con que hay un grupo inversor que es propietaro del edificio, que el contrato expira el 1 de enero de 2035 y que quiere hacer uso de él. Si el edificio de Salud era en nuestra línea temporal la última actuación, entre que licitamos, proyecto, obras y demás, puede darnos 2033 y no podemos tener un edificio para 2 años con 4 millones de euros de presupuesto. Eso es inviable y hay que abrir una nueva vía.
–Iban a buscar un solar cercano.
–Sí, nos pusimos manos a la obra con la administración local. Desde delegación nos hablaron de un par de solares en el entorno, siempre cerca y, claro, con una serie de metros y condiciones satisfactorias para el uso judicial. Pero finalmente no ha podido ser así. Hemos trabajado con el Ayuntamiento arduamente, pero los suelos que podían ser válidos no tienen los condicionantes urbanísticos para que al final acaben albergando un edificio administrativo judicial. La realidad es que nos encontramos ante una problemática en la ciudad de Granada, porque no se puede seguir con la línea de trabajo que nos encontramos al llegar.
–¿Y qué van a hacer entonces?
–Pues es una buena pregunta... Ahora mismo vamos a hacer las plantas sexta, séptima y octava de Caleta. Luego vamos a pasar a la planta baja, donde adecuaremos unos espacios para que alberguen los archivos judiciales. Y después actuaremos sobre la Audiencia, a ver si somos capaces de llevarla al edificio de Plaza Nueva. Pero todo esto estamos ahora mismo programándolo... Lo que sí es verdad es que tenemos que buscar un 'plan b' ya, una alternativa real y seria. Y yo creo que, a día de hoy, pasa por que en Granada se plantee muy seriamente un futuro con una Ciudad de la Justicia.
-¿Un edificio en el extrarradio?
–Yo entiendo que debe ser fuera porque este tipo de equipamientos consumen muchísimo suelo. Son edificios grandes y los centros históricos no tienen solares en este sentido. Hay que salirse a las zonas de expansión y buscar ahí los terrenos. En eso están Sevilla y Jaén, dos sitios donde vamos a construir ciudades de la justicia. Y en eso estuvo Málaga, con un resultado al final excelente. Sinceramente creo que es lo más razonable.
-Pero, ¿hay dinero para eso?
–Estamos en un estadio ahora mismo en el que no nos podemos plantear eso. Nosotros, ante cualquier cosa que hemos hecho, siempre vamos de la mano del sector y lo primero que tenemos que hacer es sentarnos con el sector y que esté de acuerdo.
-¿El TSJA seguirá donde está, en el Palacio de la Real Chancillería?
–Sí, el TSJA permanecería allí, por supuesto, es un edificio histórico importantísimo para la ciudad.
-¿Cuánto gasta la Junta en alquiler en sedes judiciales aquí?
–Gasta 1.099.393 euros. Ese es el gasto de alquiler anual en sedes de Granada capital sin IVA.
-¿Qué otras actuaciones inminentes hay en la provincia?
–Ahora mismo estamos a punto de comenzar las obras en Almuñécar, donde hay dos sedes judiciales en las que no se estaba prestando un servicio digno para nada. Nos pusimos rápidamente a trabajar y sacamos a concurso una nueva ubicación. Se hizo el proyecto y ahora está a punto de dársele el permiso de obras, que espero que empiecen el mes que viene. Luego estamos bastante enfocados en Órgiva. Hemos ido a atender aquellas necesidades que el TSJA nos pone negro sobre blanco anualmente. Después entrarán en la agenda los partidos judiciales de Loja y Motril.
-¿Están ya los juzgados preparados frente a la Covid-19?
–El consejero Juan Marín llegó a un acuerdo con el TSJA para que un 50% de las salas de vistas estuviesen equipadas con mamparas y lo hemos superado con creces. Actualmente, en la provincia cuentan con ellas un 79%. Aparte de eso, hicimos frente al coronavirus con hidrogeles, mascarillas, guantes... Aquellos primeros días fueron complicados, pero 'se estuvo'. Posteriormente nos hemos centrado en el distanciamiento social y el control de aforo.
-¿Cuándo seguirá la remodelación del edificio del Banco de España, actual sede de la Fiscalía Provincial de Granada y de la Fiscalía Superior de Andalucía?
–Se están preparando los pliegos para sacar a licitación la redacción del proyecto básico. En el edificio del Banco de España hay una parte que sí está actualizada, la que da a la fachada. El resto del edificio tiene un mantenimiento mínimo pero está en desuso.
-Ha venido a Granada a inaugurar el Juzgado de Primera Instancia 19. Se pone en marcha cuando ya hace falta otro, dicen...
–Eso es una máxima: cuando vienes a inagurar un juzgado siempre te piden que hagas otro. Llevamos 15 este año en Andalucía y yo creo que estamos poniendo todos los esfuerzos y todos los recursos por crear los órganos que, por otro lado, nos dice el Ministerio.
-En materia de Infraestructuras judiciales, ¿se hace lo que se puede o lo que se quiere?
–(Risas) Se hace lo que se puede siempre, ojalá se pudiera hacer lo que se quiere. Lo que es una realidad es que la Justicia, en lo que a sedes judiciales se refiere, se ve que no se ha dotado económicamente a lo largo de los años. Se hace lo que se puede... pero se está pudiendo hacer bastante más que antes. Estamos haciendo un esfuerzo.
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