Granada impulsa un salto hacia la construcción industrial para hacer casas como coches
Promotoras y otras empresas del sector se unen para fomentarfuturas 'fabricas' que construyan viviendas en Andalucía con el reto de aumentar la calidad y acortar plazos de entrega
Industrializar la construcción o en otras palabras, dejar de levantar viviendas al 100% sobre el terreno para trasladar el proceso constructivo a plantas industriales, donde ... se fabriquen las casas o algunos de sus elementos como las fachadas, acortando plazos de tiempo para luego trasladarlas a su destino final. Ése es el «futuro» del ladrillo y la «revolución» que el sector pretende impulsar desde Granada. Un grupo de potentes empresas del ámbito de la construcción, desde Consentino hasta promotoras como AEDAS Homes, junto a las patronales del sector se han propuesto liderar el paso de la construcción artesanal a la construcción industrial en Andalucía utilizando como vehículo el Clúster de la Construcción Sostenible de Andalucía (CSA) que está en Padul.
La semilla de un futuro en el que las viviendas saldrían ya hechas de fábricas en Andalucía, como si fueran coches, acaba de plantarse en este clúster con la puesta en marcha de un grupo de trabajo que pretende diseñar y definir cómo tiene que ser este proceso de industrialización del sector. La idea es sumar empresas y conocimiento a través de esta asociación público privada, aspirar a fondos europeos para ir avanzando iniciativas de transformación del sector y crear futuros consorcios privados que financien plantas industriales de viviendas.
El secretario general de la Asociación de Constructores y Promotores de Granada y de la regional andaluza de los Promotores Fadeco, Francisco Martínez Cañavate, explica que el proyecto de crear un grupo para impulsar la industrialización de la construcción nace de la necesidad de acortar los plazos de entrega de las viviendas, una demanda creciente que las promotoras detectan.
La misma vivienda que sobre el terreno se levanta en 18 meses con un proceso industrial tardaría apenas cinco meses en terminarse, más otro mes para implantarla en su solar correspondiente. También incide en que la industrialización es el futuro para un sector que se está quedando sin cantera. «Antes iba el capataz con un peón y esto ha cambiado», recuerda.
Según explica, el modelo de construcción industrial tiene además ventajas importantes como la calidad de las prestaciones y del producto final, el incremento de la productividad, la eficiencia energética o la mejora en la prevención de riesgos laborales, al evitarse la construcción en altura. «La construcción no puede ser ajena a los avances de la llamada industria 4.0, que es la tendencia de digitalizar y automatizar los proceses de producción y que es considerada la cuarta revolución industrial», señala. «El objetivo final es el de construir plantas de viviendas industrializas en Andalucía en el año 2026», resume el representante de las organizaciones del sector de la construcción.
«Las empresas andaluzas están dispuestas a liderar esta revolución»
Las viviendas industriales son ya una realidad en países del Norte de Europa que trasladan los procesos de construcción a plantas bajo techo, para adelantar plazos y mejorar procesos. En Andalucía y España, hay iniciativas de fabricación a pequeña escala de viviendas modulares y también de cuartos de baño para promociones pero no existe una planta industrial que pueda servir como modelo o referencia, según explican desde el clúster. En Granada, hasta el momento el primer paso en este sentido lo ha dado la promotora AEDAS Homes que ha integrado en sus nuevas promociones placas de fachada fabricadas de forma parcial en plantas industriales.
«Pero el reto es dar el salto a hacer viviendas industrializadas en altura y es grande porque no tenemos donde fijarnos en España», esgrime Francisco Martínez Cañavate, que defiende que la industria de la construcción andaluza sea la que lidere este proceso. En este sentido subraya que subirse a este tren es una necesidad para un territorio donde se construyen el 20% del total de las viviendas de España. «Sin duda esta transformación tiene también amenazas como la posibilidad de que empresas de fuera monten plantas industriales en Andalucía, de ahí que el objetivo es que sea el tejido empresarial andaluz el que impulse esta transformación en nuestro territorio», esgrime. «Esta transformación es inevitable, es el futuro de la construcción y no podemos verla como una amenaza para el sector sino como una oportunidad. Las empresas andaluzas están dispuestas y preparadas para liderar esta revolución», concluye el presidente del clúster.
El presidente del clúster Andaluz de la Construcción, Álvaro Pérez, explica, por su parte, que la recién nacida mesa por la industrialización de la construcción va a mantenerse muy viva y va a seguir integrando a empresas privadas de toda la cadena de valor que genera la construcción, desde proveedores de materiales hasta promotoras, pasando por agentes de conocimiento como la Universidad y administraciones públicas «que puedan acompañar al cluster en este proceso». «Estamos muy satisfechos de la acogida que está teniendo la iniciativa, tanto a nivel público como de empresas privadas. Nadie nos dice no, lo que está claro es que el tren del futuro del sector pasa por aquí», apunta.
El objetivo además es diseñar proyectos de industrialización del sector que tengan posibilidades de captar fondos europeos. «El clúster CSA se encuentra entre las entidades aspirantes a ser Digital Innovation Hub de la UE, eso significa que tendría acceso a presentar proyectos vinculados a la transformación digital del sector mediante un proceso restringido con mayores probabilidades de acceder a fondos», concluye.
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