El aceite de Granada triunfa en Japón, hasta como producto de belleza

Las empresas de la provincia han exportado 4,5 millones de euros a Japón entre enero y julio de este año, más del doble que en el mismo periodo del año anterior, según los datos de la Empresa Pública Andaluza de Promoción Exterior, Extenda. La práctica totalidad del crecimiento espectacular de este año se debe al empuje del aceite de oliva que registra 3,9 millones de euros de ventas a Japón por parte de las empresas granadinas, una variación del 123,7%.

Las cifras de ventas al país asiático están lejos, por ejemplo, de los 28 millones de euros en aceite que venden las empresas granadinas a Estados Unidos, pero el mercado asiático gana cada vez más peso e importancia por su potencial y espectacular ritmo de crecimiento. En este año, Granada es la provincia andaluza que experimenta el mayor incremento de ventas a Japón de toda Andalucía, seguida de lejos por Málaga, que ha aumentado sus exportaciones a Japón un 46,9%.

Uno de los grandes responsables de la evolución ascendente que muestra la gráfica de las exportaciones granadinas a Japón es Aceites Maeva, la productora y distribuidora más fuerte de Granada, que tiene delegaciones en China, Francia, Estados Unidos y una fábrica en Méjico. La apuesta que hicieron en 2018 por abrir una oficina comercial en Tokio también está dando sus frutos con una importante expansión comercial en este país.

«En Japón hemos crecido muchísimo. Nuestra oficina comercial en Tokio está teniendo muy buenos resultados, el japonés es un mercado con un alto nivel de exigencia y ha sido muy positivo establecernos allí, porque les gusta que les atiendas en su horario y en su idioma», valora el consejero delegado de Aceites Maeva, Luis Torres Morente.

«Es un mercado muy maduro con un poder adquisitivo muy alto y ésto es lo que nos empujó a atenderlo con oficina propia. Tenemos dos líneas de negocio, nuestro aceite embotellado en aerosol, que tiene gran acogida y por otra parte vendemos el aceite a envasadores locales que lo comercializan con su marca propia», apunta el empresario aceitero.

También el Grupo Dcoop, que integra a veinte cooperativas aceiteras de la provincia granadina, tiene el foco puesto en Japón como un mercado cada vez con más futuro para el aceite español.

El director de Comercio Internacional de Dcoop, Manuel Pérez, esgrime que el acuerdo comercial con el país asiático que se firmó en 2018 y permitió eliminar aranceles y agilizar trámites administrativos marcó un punto de inflexión para incrementar la ventas.

«Para nosotros es un mercado muy interesante. Son clientes muy exigentes, demandan calidad del producto en todas sus facetas y cuesta mucho entrar, hay que estar preparado pero el producto va teniendo cada vez más conocimiento y capilaridad a través de distribuidores locales. Desde la salida del covid se percibe como un alimento saludable y también se utiliza para otros usos como el cosmético«, esgrime.

La occidentalización de los restaurantes, la tendencia alcista de penetración de la cocina mediterránea en Japón o el fuerte trabajo de promoción que se ha realizado en los últimos años son factores que están empujando las ventas.

Otra de las marcas granadinas de aceite con penetración en Japón es Omed, de Ácula, que corrobora el gran crecimiento que experimentan en este mercado exigente. «Antes vendíamos un palé cada seis meses y ahora uno todos los meses, el mercado asiático en general va a más», explican desde la firma granadina que destaca el éxito de su aceite de oliva con yuzu, un cítrico de origen japonés, con el que triunfan en ese país.