Las 'goteras' judiciales de Casa Ágreda
El TS decidirá si avala la obligación de la oenegé AIDE de devolver el palacete al municipio, tras el archivo del caso en la vía penal por no constituir la frustrada cesión delito alguno
Cuando don Diego de Vera Agreda y Vargas, caballero de la Orden de Santiago y Veinticuatro de Granada, mandó construir en el siglo XVI ... la casa que lleva como nombre su apellido en el barrio del Albaicín de la capital, no imaginó seguramente las intrigas judiciales que el palacete iba a albergar en el futuro, hoy nuestro presente.
La edificación ocupa dos parcelas colindantes, en la Cuesta de Santa Inés, tal y como especificaba la empresa TAXO Valoraciones en el informe que le encargó para tasar su valor el mismo juzgado que ha archivado por segunda vez la causa en la vía penal, Instrucción 9. Esta semana se conocía esta decisión judicial, tras más de tres años de instrucción.
El desenlace es relevante fundamentalmente para el exalcalde José Torres Hurtado (PP), su exconcejala de Urbanismo y los altos cargos municipales que intervinieron en la operación de cesión del inmueble a una ONG, AIDE Federation –radicada en París y vinculada con Marruecos– para fines sociales. El archivo, que no es firme –cabe recurso ante la Audiencia– despojaba a todos ellos de la condición de investigados por posibles delitos de prevaricación, malversación de caudales públicos y tráfico de influencias. No delinquieron.
Aquella cesión se hizo con condiciones. Se trataba de «un derecho de superficie» durante 40 años con opción a compra y con la obligación de asumir los costes de su rehabilitación. Porque la edificación, con más de 3.000 metros cuadrados construidos (2.155 en la parte histórica y 1.195 más en la parte nueva, que fue levantada a mediados del siglo XX) presentaba ciertos desperfectos. Sobre todo deterioros en paredes y cubiertas fruto del paso del tiempo, de la falta de mantenimiento que conlleva cerrar la puerta de un lugar y dejarlo sin vida, desocupado.
Las llaves
Y así sigue Casa Ágreda, inerte, cerrada. Sus llaves continúan en poder de AIDE y también la posesión de la finca. De hecho fue la oenegé la que permitió la visita de los peritos del juzgado, que fue girada en febrero de 2019. Así, tanto en la teoría como en la práctica, el acceso a su interior sólo está permitido a la ONG mientras perviva el litigio de su cesión frustrada, que actualmente se encuentra 'sobre el tejado' del Tribunal Supremo (TS). Y ello porque, de momento, el Consistorio no ha pedido que se ejecute de forma provisional la sentencia que ordena devolver al municipio el palacete.
De hecho, según ha confirmado a IDEAL José de Cueto López, el abogado de la oenegé AIDE, haber llevado el caso al Supremo «no impide» que el Ayuntamiento pueda solicitar esa ejecución provisional. Lo ha podido hacer desde la primera resolución.
La primera sentencia fue dictada por el Juzgado de Primera Instancia 13 de Granada y luego respaldada por la Audiencia Provincial. En el fallo primitivo, el juez Santiago Ibáñez tumbó el contrato por entender que AIDE había incumplido los plazos para la rehabilitación de Casa Ágreda.
La última novedad es que el alto tribunal ha abierto la puerta a pronunciarse sobre si la resolución de aquel contrato fue ajustada o no a derecho. Así lo ha confirmado el propio De Cueto, que informó de que la sala «ha admitido a trámite» los tres recursos de AIDE.
¿Y qué habría que rehabilitar en este lugar donde antaño moraron señores de capa y sombrero, y que acabó siendo usado como colegio concertado e internado del Colegio Divina Infantita? Cuando se firmó aquella cesión a AIDE, en 2015, el edificio ya presentaba desperfectos. Y la dejadez inherente a su desuso ha derivado en un mayor deterioro, como ha venido denunciando la exconcejala de 'Vamos, Granada', Marta Gutiérrez, con una opinión legitimada por su formación (es arquitecta).
En su informe pericial, TAXO destacaba que «aparentemente la estructura parece estable sin problemas graves de consolidación». Eso sí, resaltaba que en los acabados del palacete eran «numerosos los deterioros con humedades». Esos daños, propios de su abandono, son apreciables en «paramentos y techos». La tasación también desvelaba que las cubiertas de Casa Ágreda fueron rehabilitadas hace tres lustros, pero advertía de que «requieren de mantenimiento para asegurar la estabilidad futura de las edificaciones».
A juicio del equipo de expertos que recorrió el inmueble, sería necesaria una rehabilitación «integral», consolidar estructuras, techos, artesonados... «Aunque se desconoce el uso final, cualquiera que se dé, el alcance de las obras va a ser superior al 75% de los costes de una construcción a nuevo», consideraron. Aparte habrá que tener en cuenta su nivel de protección local. No es un BIC, pero Casa Ágreda está catalogada en el PEPRI Albaicín, que es el plan especial de protección de este barrio, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1994.
Sobre su uso, los expertos detallaron que su edificación principal estaba considerada como un equipamiento de «uso religioso», permitiéndose «el uso docente dentro de esa calificación».
De momento, el palacete, sus columnas dóricas, jónicas y corintias, sus escudos, sus techos mudéjares tendrá que esperar a que primero se reparen sus 'goteras' judiciales. La de la vía penal no está cerrada del todo al caber la posibilidad de recurso. Hay cuatro acusaciones que podrían apelar: aparte de fiscalía, el empresario Ramón Arenas, 'Vamos, Granada' y el grupo municipal Podemos-Izquierda Unida-Adelante. La de la vía civil tampoco está sellada hasta tanto no se pronuncie el TS.
Y mientras tanto, el tiempo pasa sin que en Casa Ágreda pase nada. Sólo el tiempo.
La inquietud del edil Fernández Madrid
La inquietud por el presente y el futuro de Casa Ágreda del concejal del Grupo Socialista Miguel Ángel Fernández Madrid, actualmente en la oposición en el Ayuntamiento de Granada, vuelve a quedar patente. En un escrito reciente, de 29 de enero, ha pedido información sobre los pasos que se van a seguir desde la Asesoría Jurídica y Patrimonio. En su respuesta, el letrado titular le ha comunicado que en esas fechas no tenía constancia oficial de que AIDE hubiera recurrido al TS, pero en caso de que se interpusieran recursos y se admitieran, indicaba que seguiría en ellos «los trámites procesales oportunos tendentes a la defensa de la sentencia dictada por ser esta favorable a los intereses municipales». El edil confirmó la «preocupación» de su grupo por el recurso de casación de AIDE. «No queremos que nadie en el Ayuntamiento del equipo de Gobierno esté pensando que el interés municipal es dejar perder Casa Ágreda para así ingresar un dinero que termine cuadrando un presupuesto», ha expresado a este diario, al tiempo que ha opinado que el patrimonio de la ciudad «no se merecía» este proceder. «Esperamos que el alcalde dé instrucciones claras a la Asesoría Jurídica para que este bien vuelva a manos públicas, máxime cuando está en juego también la capitalidad cultural de la ciudad», ha añadido.
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