La fallecida tras recibir un disparo en Albuñol había iniciado los trámites de separación de su marido

Los hechos sucedieron poco antes de la una de la madrugada. Los vecinos del edificio Calderón de Albuñol oyeron una fuerte discusión entre los dos miembros de la pareja y después escucharon tres detonaciones procedentes de la escopeta de caza que tenía el presunto homicida. Los propios vecinos avisaron de forma inmediata a la Guardia Civil y desde el instituto armado contactaron con uno de los cuatro hijos del matrimonio, este fue quien descubrió los dos cadáveres en el piso, recientemente adquirido por la pareja en el municipio de Albuñol.

Los profesionales sanitarios no pudieron hacer absolutamente nada porque Trinidad y Ramón estaban ya muertos. Solo quedó esperar el levantamiento de ambos cadáveres que se produjo sobre las 4.30 horas de ayer. Los cuerpos sin vida de esta pareja han sido trasladados al Instituto de Medicina Legal, IML, donde hoy se les practicará la autopsia para determinar con precisión cómo se desarrolló la escena del crimen, y de esta forma confirmar o no la hipótesis de que se trata de un caso de violencia de género.

La Guardia Civil tiene en su poder la escopeta utilizada para este crimen. Además, ha efectuado una inspección ocular en la vivienda donde aparecieron los dos fallecidos y también ha tomado testimonio a los hijos.

La noticia ha originado un gran impacto en el municipio de Albuñol. Este matrimonio era bastante conocido en la localidad, antes vivían en el anejo de Los Castillos y después se trasladaron a Albuñol. De toda la vida se han dedicado a la agricultura ya que tenían un invernadero en el término municipal de esta localidad costera del litoral granadino. Tienen cuatro hijos, uno de ellos fue quien descubrió los dos cadáveres. Otro de sus vástagos dispone de un bar-restaurante donde el matrimonio solía ir.

Según han apuntado los propios vecinos de la misma calle donde residían, «ha sido muy duro ver lo que ha pasado». Un vecino del mismo edificio asegura que «no escuché nada» hasta que «empezó a llegar la Guardia Civil y se notaba el movimiento de gente», «después había una joven en el portal dando gritos y preguntándose '¿por qué había pasado eso?'», señala pidiendo que no se diga su nombre ni se le identifique. Todas las personas consultadas ayer en Albuñol hablan muy bien de los dos. «Nadie se imaginaba que hubiera podido pasar algo así».

La alcaldesa del municipio de Albuñol, María José Sánchez, ha transmitido su pésame a la familia y ha anunciado la suspensión de las fiestas que se celebraban en la pedanía de ElPozuelo, así como la convocatoria de tres días de luto para el municipio. El delegado del Gobierno central en Andalucía, PedroFernández, también ha trasladado sus condolencias a la familia y al resto de vecino de Albuñol, tal y como comunicó ayer por la mañana después de señalar que de momento se investiga si se trata de un posible crimen machista.

Si finalmente se corrobora la hipótesis de los investigadores de la Guardia Civil, esta sería la segunda muerte por violencia de género registrada en Granada en este año. La primera fue en una pedanía de Algarinejo, conocida como Fuentes de Cesna, donde una mujer fue asesinada de un disparo por su marido el pasado 25 de enero.