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Médicos y pacientes en la jornada de puertas abiertas de dolor crónico. RAMÓN L. PÉREZ

«Si me entreno cada día en el insulto, no alcanzaré nunca la felicidad»

Los pacientes de dolor crónico buscan el camino para sacar el lado positivo a su enfermedad y poder convivir con ella

ÁNGELA MORÁN

GRANADA

Viernes, 25 de enero 2019, 02:06

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«Cuando me detectaron el dolor crónico mi vida dio un vuelco, me obligaron a jubilarme, me incapacitaron y ahora sufro dolores agudos mientras estoy ... sentada, andando o hablando». Fue el testimonio de Bienvenida Moreno, una paciente diagnosticada partir de un accidente laboral que ayer contó cómo ha afectado a su día a día esta enfermedad 'invisible'.

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