283 empresas de Granada, obligadas a redactar un plan de igualdad

Este decreto insta y obliga a las empresas de más de 50 trabajadores a elaborar y aplicar un plan de igualdad en un plazo de tres años, una situación que afecta en Granada a 283 empresas. Entre estas, especial atención tienen las que cuentan en su plantilla con entre 100 y 150 personas, ya que solo tendrán dos años para elaborarlo, mientras que los que funcionan con entre 150 y 250 trabajadores tienen únicamente un año para llevarla a cabo. Este es uno de los cambios más significativos y que calará más hondo en la mayoría de las empresas de la provincia, pues antes ese plan solo era obligatorio para las entidades que tuvieran más de 250 empleados. Además, las compañías tendrán que inscribir este plan en el registro de planes de igualdad de la empresa, que se desarrollará reglamentariamente.

Uno de los aspectos que incluye este Real Decreto-Ley es la ampliación del permiso por paternidad para conseguir equipararlo al de maternidad en el año 2021. Se hará de forma progresiva, ampliándolo este año hasta las 8 semanas, en 2020 hasta las 12, con lo que las 16 semanas se alcanzaría en 2021. Asimismo, se introduce un nuevo concepto de «trabajo de igual valor» en el que las empresas deberán pagar idénticos salarios por la prestación de un mismo empleo, sin que exista discriminación por razón de sexo. Además, cuando en una empresa de al menos 50 empleados la media de la retribuciones de un sexo sea superior en un 25% o más al promedio de sueldo del otro sexo, el empresario tendrá que justificar a qué responde esa diferencia.

«Nosotros estamos en fase de negociación y no va mal, pero aún nos queda mucho para terminar el plan. Llevamos bastantes meses con todo el proceso y esperamos tenerlo para junio, pero es un proceso muy completo que hay que hacer adecuadamente». La empresa granadina Bidafarma es una de las que trabaja para cumplir con los plazos. En su plan esperan recoger las medidas relativas a la igualdad entre empleados en cuanto a las retribuciones, la contratación, la paridad, así como la erradicación del acoso sexual o la violencia de género. «No esperamos grandes cambios porque muchos aspectos que se exigen ya los cumplíamos, pero lo hacemos también para ver las áreas en las que hay desequilibrios para corregirlos», explican.

Uno de los regímenes que llevan a pies juntillas desde hace años es la paridad entre la plantilla. «Incluso son más numerosas las mujeres que los hombres», indican desde la empresa. De ese modo, de sus más de un centenar de empleados, un 60% son mujeres y casi en todas las áreas se refleja esta situación. El único punto flaco, según cuentan, es el consejo rector, situación que esperan corregir en las próximas elecciones.

En fase de creación también se encuentra Puleva, que fue en 2012 cuando arrancó sus negociaciones para elaborar este plan de igualdad y contra el acoso, pero que se ha ido retrasando por distintos motivos. Ahora, se ha vuelto a convertir en una prioridad como base para garantizar el bienestar de sus empleados y servir para mejorar la competición de la compañía. «Consideramos que la igualdad efectiva entre hombres y mujeres es una garantía de mejora a todos los niveles. Creemos que establecer criterios objetivos no solo beneficia a las mujeres, sino a todos los trabajadores y, en último término, a la empresa, que podrá contar con los trabajadores más cualificados», afirman desde la empresa.

Tal y como señalan, se han estudiado todos los posibles ejes de actuación, centrándose principalmente en el proceso de selección, las condiciones de trabajo, la promoción, la formación, las retribuciones, la conciliación y la corresponsabilidad, así como en los posibles casos de sexismo, acoso sexual o por razón de sexo y la cultura organizativa y el clima laboral. «Así establecemos medidas que mejoren la situación actual de la empresa y alcanzar un mejor clima laboral, más justo e igualitario, así como reducir las diferencias salariales y facilitar la conciliación personal y laboral», añaden.

Estos son solo algunos de los ejemplos con los que cuenta Granada de empresas que ya han empezado a elaborar sus planes. Según ha podido saber este periódico de fuentes de CSIF Granada, otras como Rober y la Agencia de Medioambiente Amaya (Plan Infoca) ya lo tienen aprobados, mientras que García Sánchez e Hijos, en Motril, está en proceso. Pero, según cuenta CSIF, es más común que hayan empezado a realizar los planes de igualdad, pero no los de conciliación, pues no les consta ninguna empresa privada que los haya realizado.

Esta implicación por la igualdad no solo ha llegado al tejido empresarial provincial, sino que las administraciones públicas también se han convertido en las abanderadas del cambio, teniendo desde hace años sus propios planes de igualdad.Como principal baluarte se encuentra el Ayuntamiento de Granada, pionero en la creación de este tipo de planes –ya va por el quinto– y en la creación de un consejo municipal de la mujer, que data de la década de los 90. «Este V Plan Municipal de Igualdad entre Mujeres y Hombres tiene especial valor porque se ha aprobado por unanimidad en un entorno tan complicado con el nuestro, con una corporación muy diversa, pero lo hemos podido sacar porque se ha contado con todo el mundo y se ha hecho desde la participación». Ana Muñoz, concejal de Igualdad, conoce cada uno de los aspectos que se recoge en este plan en el que se abordan las políticas de igualdad desde distintos ámbitos, se incorpora el principio de igualdad entre mujeres y hombres de forma trasversal en las políticas sectoriales, se socializa a través de la educación en valores igualitarios, se lucha contra la violencia de género y se apuesta por el empoderamiento y liderazgo de las mujeres.

Además, el equipo de Gobierno ha puesto en marcha una comisión municipal en contra de la violencia de género en el que se coordinarán distintas entidades e instituciones. «Granada es la ciudad de la ciencia, de la cultura, del deporte, pero también de la igualdad. Nos hemos marcado una hoja de ruta que nos dice por dónde debemos tirar y qué hacer para mejorar», explica Muñoz.

La Junta, por su parte, se encuentra desde febrero en la elaboración del Plan General de Igualdad en el que, según la consejera Rocío Ruiz, «recogerán un conjunto ordenado de medidas tendentes a promover la igualdad en el ámbito del empleo público, incidiendo en aspectos claves como la conciliación de la vida laboral y familiar, la formación o la promoción profesional». Además, garantizó en una rueda de prensa que su departamento culminará la elaboración del II Plan Estratégico para la Igualdad de Mujer y Hombres en Andalucía, calificado de «urgencia», ya que el primer tuvo vigencia hasta 2013. Además, el Gobierno andaluz va a elaborar el I Plan de Conciliación de Andalucía. En cuanto a la Universidad de Granada, creó a mediados del 2008 la Unidad de Igualdad, con la que se impulsan políticas activas que garanticen la equidad real y efectiva entre mujeres y hombres. De igual modo, cuenta con un plan con el que se pretende eliminar todas las formas de discriminación existentes, aumentar la visibilidad y el reconocimiento de la actividad académica de las mujeres, favorecer la conciliación e integrar la perspectiva de género en todos los procesos de organización y gestión.

Con estas medidas, el tejido empresarial, político y cultural aúna fuerzas para tirar ese muro invisible pero latente que tradicionalmente ha separado a hombres y mujeres en cuanto a derechos y obligaciones en el ámbito laboral y en sus propios hogares.