El descenso 'fantasma' del paro

Estas 8.400 personas han pasado a engrosar el listado de la población inactiva; esto es, el grupo de ciudadanos compuesto por estudiantes, jubilados y de personas han dejado de buscar trabajo y ya no figuran en las listas de desempleados demandantes de empleo, así como aquellas que han abandonado la provincia granadina.

En el segundo trimestre había menos personas con trabajo que en el anterior. Mientras que en los tres primeros meses del año había 325.900 trabajadores, en los tres siguientes el número descendió a 325.600, esto es 300 personas ocupadas menos. Si se hace el balance interanual, la cifra de este sector de la población pasa de 333.900 a 325.600 personas, casi 8.400 ciudadanos menos con empleo, mientras que la cifra de población inactiva aumenta a 331.200 personas, según publicó e INE.

Así pues, la evolución recogida en los informes trimestrales de la EPA muestra que el porcentaje de paro se ha ido reduciendo paulatinamente de la misma forma que lo ha hecho el número de personas con empleo, mientras que ha ido aumentando la población inactiva. De ahí que la reducción del paro esté directamente ligada al hecho de que muchas personas que estaban activas hayan pasado a ser inactivas, hecho que los sindicatos ven «alarmante» y por el que se muestran «preocupados» ante la falta de «perspectivas» para mejorar el índice de empleo y su calidad.

Por ello, las disminución del paro en Granada representa más bien un espejismo, al que hay que sumar los empleos estacionales propios del verano, donde el sector de la hostelería cobra especial relevancia.

Con estos datos, Granada se sitúa como la cuarta provincia andaluza con mayor tasa de desempleo, con el 23,81%; por detrás de Cádiz (26,86%), Córdoba (25,63%) y Jaén (24,70%); y por delante de Almería (22,52%), Sevilla (22,16%), Huelva (20,91%) y Málaga (20,21%).

Respecto a la tasa de actividad, Granada ocupa el quinto lugar, con el 56,34% de población activa. Lidera el listado Sevilla (58,63%), seguida por Almería (58,38%), Málaga (58,01%) y Córdoba (57,53%). Cierran la clasificación Huelva (56,04%), Cádiz (55,41%) y Jaén (52,84%).

Los datos generales por comunidad autónoma señalan que el paro de Andalucía pasó del 24,74% del primer trimestre al 23,09% en el segundo. Un descenso generalizado no tanto por la creación de empleo sino por el incremento de población inactiva, según recogen también múltiples sindicatos, que en diferentes comunicados han manifestado sus críticas ante estas frías cifras porcentuales y celebradas por la Cámara de Comercio de Granada al considerar que «la ocupación y el desempleo consolidan su mejora gradual hasta niveles del año 2008».

La previsión de la Cámara de Comercio es que «el proceso de creación de empleo proseguirá con dinamismo durante la segunda mitad del año», a pesar de que reconoce la temporalidad y estacionalidad de los empleos, por lo que hace un llamamiento para centrar los esfuerzos en la política económica con el fin de «mejorar la calidad del empleo, aumentar la tasa de actividad, reducir la burocracia y los costes derivados de la contratación, y reformar las políticas activas de empleo».

Más allá de las peticiones de este organismo están las críticas de múltiples sindicatos respecto a lo que consideran un «espejismo de la realidad laboral de nuestra provincia», según el responsable de Comunicación de CC OO, Rafael León. Para este sindicalista, la disminución del paro está «ligada exclusivamente al aumento de la ocupación de los sectores servicios y construcción». A su vez, destaca que la disminución de personas ocupadas y el aumento de las inactivas se debe a que la provincia «carece del tejido productivo adecuado a la demanda laboral». De ahí que CC OO reclame «un cambio de modelo productivo en nuestra provincia» para conseguir un «empleo estable y de calidad», todo ello a partir de una negociación colectiva entre sindicatos y organizaciones empresariales.

Por su parte, el presidente de la Confederación Granadina de Empresarios (CGE), Gerardo Cuerva, se mostró «decepcionado» por los datos de la EPA porque el descenso de parados «no está relacionado con la creación de empleo, sino con una importante caída de la población activa, que distorsiona los resultados». En este sentido, Cuerva fue conciso: «Que baje el paro debería ser siempre una buena noticia, pero en este caso no podemos alegrarnos porque la caída no viene de la mano de la creación de empleo, sino de una merma del número de granadinos que se encuentran en disposición de trabajar». Desde la CGE recuerdan que el sector de la agricultura ha perdido 7.000 activos en el segundo trimestre y la industria otros 400. Para Cuerva, los datos de la EPA demuestran que Granada sale peor parada que el resto del territorio por un «grave desequilibrio», ya que la provincia supera la tasa de paro andaluza (23,09%) y la nacional (15,28%).

El secretario general de UGT Granada, Juan Francisco Martín, resalta que «la precariedad y la estacionalidad siguen siendo las dos principales características del mercado laboral granadino» y lamenta que el descenso de desempleados siga la tendencia de este trimestre de signo estacional en el que crece «el turismo, la hostelería, se anima la actividad en la construcción y se desarrollan las campañas agrícolas de temporada». A su crítica añade que «sólo un bajo porcentaje de contratos formalizados en abril, mayo y junio fueron indefinidos a tiempo a completo».

Por último, desde CSIF celebran que el paro baje en 8.100 personas en la provincia de Granada, pero alertan del descenso de población activa, de la tasa de paro superior a la media nacional y andaluza, que hacen que Granada se sitúe «como la séptima provincia española con mayor desempleo con más de 100.000 personas sin trabajo».