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Fernando Alonso, en Montreal.
McLaren se refuerza para Canadá
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McLaren se refuerza para Canadá

Alonso y Button disfrutarán de potencia extra en sus motores, mientras Hamilton busca la redención en ‘su’ circuito

David Sánchez de Castro

Jueves, 4 de junio 2015, 20:17

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Canadá puede marcar un antes y un después en la deriva de McLaren esta temporada. El equipo británico ha decidido abrir la mano a las evoluciones en su motor Honda, y en Montreal ya montarán una unidad de potencia más avanzada que en las carreras anteriores. El motorista japonés ha utilizado para esta carrera tres de los nueve tokens, esas fichas que tienen los equipos para ir evolucionando a lo largo de la temporada. La noticia no tiene por qué aparejar necesariamente una mejora notable de rendimiento, ya que la fiabilidad es aún uno de los puntos más débiles de la escuadra británica.

Ahí es donde deben apretar más desde el equipo inglés. «Pese a los problemas de fiabilidad que hemos tenido en las dos últimas carreras, el coche iba bien, así que nuestra prioridad es tener un fin de semana sin problemas y conseguir el máximo rendimiento», explicaba Fernando. Alonso. A estas dificultades se unen las propias del circuito. «Es una carrera peligrosa con mucha velocidad, con lo que pierdes algo de agarre en las curvas y superas los 330 ó 340 km/h muy cerca de los muros, lo que aumenta el riesgo. Pero veremos cómo va y ojalá que sea una carrera divertida», avisaba este jueves el asturiano en el paddock.

No obstante, serán todo un respiro para Alonso y para Button que estas novedades técnicas se introduzcan, precisamente, en el circuito Gilles Villeneuve. «Canadá es un circuito de potencia, así que necesitamos más energía», preveía Yasuhisa Arai, el máximo responsable de Honda y uno de los principales señalados, por tanto, en este gran premio.

El Gilles Villeneuve es uno de los circuitos más divertidos para ver y para conducir, pero también uno de los más arriesgados. Los pilotos pasan muy cerca de las protecciones, especialmente del llamado Muro de los campeones. Y precisamente un campeón, el último, será uno de los que más focos se lleve. Lewis Hamilton mantiene un idilio con Canadá desde 2007, cuando debutó. Fue el escenario de su primera victoria, y es el piloto con más podios y más victorias (tres) en este circuito. Por eso, tras la decepción de Mónaco, llegar a Montreal es un auténtico descanso para el campeón y líder de la clasificación del Mundial. El británico aterrizó en su ostentoso jet privado en Montreal dispuesto a quitarse la espina de la desastrosa estrategia de su equipo que le arrebató la victoria en el Principado.

Aquello ya es agua pasada para Hamilton. «Va a haber muchas preguntas sobre Mónaco, pero realmente no quiero recordarlo. He avanzado y ni siquiera tengo que pensar en ello ahora. Literalmente, sigo adelante. No me podría importar menos. No puedo hacer nada al respecto, por lo que no tiene sentido pensar en ello», avanzó el británico en la rueda de prensa. «Tengo plena confianza en el equipo. Hemos ganado, hemos tenido éxitos increíbles juntos. Una carrera no va a mellar la sólida relación que hemos construido. Honestamente, no he pensado en la última carrera durante mucho tiempo», señaló. Y no le falta razón: en estas semanas ha estado dedicado a la Gumball 3000, una carrera de superdeportivos que se disputa entre Los Ángeles y Las Vegas en la que Hamilton acabó antes de tiempo cuando su Koenigsegg Agera HH se quedó sin combustible.

Otra mirada estará puesta en el compañero de Carlos Sainz, Max Verstappen. El holandés arrastra una sanción de cinco posiciones desde Mónaco por su choque con Grosjean, y lejos de arrepentirse, señaló que este incidente le hizo aprender. Más duro se mostró Felipe Massa, que reiteró su idea de que esa sanción era muy merecida a lo que Verstappen le respondió que revisase su accidente aquí el año pasado. El niño salió rebelde, y no duda en mirar a los ojos y contestar, desafiante, a quien lleva muchos más años en la Fórmula 1.

Mientras tanto, Carlos Sainz es feliz. Será una nueva prueba de fuego para sus capacidades, en otro circuito que no conoce y en el que tendrá que demostrar si es capaz de sobrevivir en un GP de Canadá que se avecina complicado. También será un fin de semana complejo para Roberto Merhi, al que le han colocado de probador a un viejo rival, Fabio Leimer, a quien conoce de otras categorías.

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