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María Bernabéu, tras la derrota.
Déjà vu
OPINIÓN

Déjà vu

-@FerranPique es judoka, jefe de prensa de la Federación Catalana de Judo y director de judoyuko.com

FERRÁN PIQUÉ

Jueves, 11 de agosto 2016, 18:56

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Cuanto más duro sea el camino, cuantas menos facilidades tengamos; más mérito tendrán los éxitos-explicaba María Bernabéu hace dos años, cuando quizá ni se imaginaba luchando por una medalla en los Juegos de Río. Y el mérito, nadie se lo puede sacar; el miércoles devolvió la esperanza al judo español tras 3 días de representación pero a la vez de desesperación; pues los resultados se quedan posiblemente lejos de lo esperado de 5 judokas que se han entregado en cuerpo y alma para culminar el fatigante pero a la vez ilusionante camino a Río.

El judo español vuelve a sentir la sed de medallas en unos juegos. María Bernabéu puso fin a la representación española en la competición de judo y lo hizo rozando la medalla que se le resiste a la Española de Judo desde hace 16 años, cuando Isabel Fernández logró la gloria colgándose el oro en Sydney.

Vibraba la comunidad judoka española a medida que iban llegando las noticias desde la capital brasileña, y es que muchos ya veían la luz al final del túnel durante un combate que se tuvo que decidir en la técnica de oro. La judoka entrenada por Carlos Montero se quedó a las puertas del podio en su primera cita olímpica. Esta atleta de 28 años, actual subcampeona mundial era la última esperanza de la expedición española, y cumplió con las expectativas metiéndose en los combates por medalla.

Bernabéu hizo un combate impecable ante la competidora alemana. El enfrentamiento estuvo empatado durante los 4 primeros minutos, hecho que obligó a alargarlo por la vía de la técnica de oro sin límite de tiempo. La gallega, con una resistencia a prueba de cañón, llevó la iniciativa en todo momento hasta que la judoka del conjunto germánico sorprendió a la número 8 del mundo haciéndose con el wazari que le daba la victoria y la medalla de bronce. Diploma olímpico pues para Bernabéu que se abrazaba a su entrenador en acabar un largo y exigente combate que no dio el soñado metal a la delegación nacional.

Los resultados no reflejan el nivel real del judo español-se lamentaba orgulloso el Presidente de la Real Federación Española de Judo, D. Juan Carlos Barcos. Dejá vu para el judo español que ya lleva dos juegos en los que los metales se han escapado tras las técnicas de oro. Sugoi Uriarte, en Londres2012, vio escapar la medalla de bronce después de un combate que estuvo empatado incluso tras la golden score y que se acabó decidiendo por mayoría de los tres colegiados del tápiz en una polémica decisión arbitral que frustró el sueño del vitoriano.

Fue quizá esa polémica y el debate abierto sobre el por qué pueden 3 árbitros otorgar la victoria por una simple mayoría de 3; que tras los Juegos de Londres se eliminó el hantei tal y como se denominaba a esta práctica-, obligando a alargar los encuentros hasta que uno de los dos puntúe. Y en Río fue la alemana la que marcó antes. Diploma Olímpico que sabe amargo. Diploma Olímpico que sabe a bronce. Tokio2020, a la tercera irá la vencida.

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