Piqué, escudo de España

Por eso, eligió salir a dar explicaciones de modo muy claro, explicando que el origen de los silbidos era la rivalidad entre Madrid y Barcelona. «No intento cambiar nada con esta rueda de prensa, si la gente me pita por un tema Catalunya-España, no tiene razón. Y poner en duda mi compromiso no es justo. Si me pitan en el Bernabéu, no pasa nada, es sinfonía para mí. Que me piten. Pero no debe afectar a la selección. No podemos dejarnos influenciar por todo eso. Lo último que haría es dejar la selección porque daría la razón a toda esta gente que me silba por unos motivos que no son correctos», manifestó.

Añadió que «los pitos son debidos a la rivalidad Barça-Madrid y a mis comentarios respecto al rival. Yo fui a la última manifestación del 11-S y luego jugué (ante Bielorrusia en Huelva y Ucrania en Sevilla) y nadie me pitó. Por eso no creo que sea un tema de la relación Catalunya-España. Mi compromiso con la selección ha sido el máximo desde que debuté en 2003 en una Sub'15, en 2009 debuté en la absoluta. He jugado 70 partidos. Lo he dado todo. Mirad la hemeroteca. No tengo que defenderme de nada, no he dicho nada malo. Si soy sincero, los pitos no me han afectado mucho. Me afectan más por el equipo que por mí. Que la gente pite, tiene todo el derecho del mundo. Me preocupa por el míster, porque no le gustan estas situaciones, y por los compañeros, que no están cómodos».

Cuestión de tiempo

Del Bosque, muy enfadado por lo sucedido en León y Oviedo, estaba avisado de su discurso y se quedó tranquilo porque valoró más su «compromiso» a que se le fuera a considerar un agitador de la rivalidad entre los dos grandes. Piqué no quiso este miércoles ahondar más en el tema de los silbidos, y no le cambia el gesto cuando se le habla de la posibilidad de que en el entrenamiento oficial a puerta abierta de Las Gaunas previo al encuentro puedan reproducirse los pitos de León y Oviedo. Sabe que hay una iniciativa del diario La Rioja, llamada #aplaudamosaPiqué para este partido en el que la selección puede certificar su clasificación para la Eurocopa si saca al menos un punto ante Luxemburgo. «Con el tiempo, cada uno se pone en su sitio. Tengo toda la confianza del mundo en que va a ser así. Lo tengo claro», se limitó a decir el central en Radio Marca, a donde participó en una sorpresa a Cesc Fábregas por sus 100 partidos con la selección.

Como otras ocasiones, sacaron la cara por él sus compañeros. Este miércoles, Etxeita, Nolito y su amigo Cesc. «Los que pitan a Piqué, pitan a todos los jugadores. Al final el público es libre y da igual lo que digamos nosotros», dijo el delantero del Celta, que lo conoció en su etapa azulgrana. «Es algo que irrita a todos, estoy con él de que el tiempo lo cura todo», explicó su amigo ahora en el Chelsea. Por su parte, Etxeita recordó que Piqué «ha demostrado que está comprometido y ha dado un grandísimo nivel. Ahí están los resultados. Habrá que aplaudirle en todos los campos», explicó el central del Athletic, que debuta en el grupo y está deseando poder hacerlo.

Ahora, la lesión de Ramos le deja a Piqué como líder natural de la zaga. «Llevo 71 partidos, vamos haciendo camino», dice el internacional cuando se le pregunta por la opción de alcanzar las cien internacionalidades. Lo cierto es que sólo el '3' suma más encuentros en la absoluta que los otros defensas citados para este doble partido: Jordi Alba (36), Juanfran (15), Azpilicueta (10), Bartra (5), Nacho (1), con Etxeita y Mario Gaspar por debutar. «Es verdad que hay varios nuevos y otros más habituales (Juanfran, Alba, Bartra o Azpilicueta) pero tenemos experiencia internacional con nuestros clubes», explica el lateral navarro del Chelsea. «Hay muchos jugadores buenos y también en el puesto de central. No tiene ningún sentido decir que no tenemos centrales. Solo hace falta ver la liga española».

Ahí juega Bartra, que considera a Piqué un referente personal y defiende la valía del resto de la zaga: «Lógicamente ha habido una transición, ha habido jugadores jóvenes que aprietan desde abajo. Hay una mezcla de veteranos con nuevas incorporaciones y creo que va a ser la base del éxito. Hay suficientes centrales para llegar a la Eurocopa». El eje de la zaga será azulgrana y Piqué solo espera conseguir la clasificación y que por una vez, nadie del Gobierno tenga que valorar otra cosa que no sea su juego.