Blatter y los «arreglos diplomáticos» en los Mundiales

Dos días después de lanzar afirmaciones similares en la agencia rusa Tass, el presidente dimisionario de la FIFA golpeó más fuerte en las hojas del Financial Times: «»Se logró entre bastidores, había un acuerdo diplomático», «un pacto de caballeros», para que los dos torneos se disputasen en Rusia -donde finalmente se hará- y Estados Unidos -Catar ganó la votación-.

Si el plan para 2022 fracasó, fue, según Blatter, únicamente a causa de «la interferencia gubernamental de Sarkozy», que en esa época era presidente de Francia. «Una semana antes de la elección recibí una llamada telefónica de Platini que decía: 'Ya no estoy en tu plan porque el jefe del Estado me ha dicho que tenemos que tener en cuenta... la situación de Francia'. Y me dijo que eso afectaría a los votos, porque tenía más votantes con él», afirmó Blatter. Es la segunda vez en dos días que carga sobre Michel Platini, su enemigo y presidente de la UEFA, la responsabilidad de la controvertida atribución del Mundial 2022 a Catar. Las condiciones en la adjudicación de estos dos Mundiales, en una votación doble el 2 de diciembre de 2010, están en el centro de una de las dos investigaciones concernientes a la FIFA.

Rusia lo desmiente, Sarkozy también

Las afirmaciones repetidas del suizo provocaron este viernes la reacción del ministro ruso de Deportes, Vitali Mutko: «Rusia no llegó a ningún arreglo con nadie, obtuvimos esta Copa del Mundo gracias a nuestros méritos». El miércoles, la Federación Inglesa estimó que las declaraciones de Blatter justificaban «una investigación». Inglaterra era candidata a organizar el Mundial 2018.

En lo concerniente a 2022, Platini siempre admitió haber votado por Catar pero negó el hecho de que fuera a petición del antiguo presidente de Francia (2007-2012), quien poco antes le había invitado a una cena en el Elíseo en compañía del futuro emir de Catar. Sarkozy, de visita a Moscú, también desmintió el jueves las afirmaciones de Blatter. «Este es otro que me presupone más poder», ironizó Sarkozy. «Esto es sin duda una alusión que hace por su gran 'amistad' con Michel Platini», remarcó.

El sucesor de Blatter será elegido el 26 de febrero y siete candidatos están en la carrera. Entre ellos, Michel Platini, presidente de la UEFA, cuya candidatura esta congelada durante su suspensión de 90 días debido a un controvertido pago de 1,8 millones de euros recibidos de parte de Blatter en 2011.

Bancos interrogados

Más allá de las polémicas sobre la atribución de estos dos Mundiales, el escándalo FIFA abrió un nuevo camino por los pasillos cerrados de los bancos suizas. Credit Suisse, el número dos del sector, indicó haber sido preguntado por las autoridades estadounidenses y suizas en el marco de su investigación. Este es el primer banco suizo en hacer esta confesión. Según su informe financiero trimestral, Credit Suisse fue interrogado sobre «sus relaciones bancarias con algunos individuos y entidades vinculadas a la FIFA».

Estas consultas se refieren sobre todo a personas y entidades mencionadas en la acusación presentada por las autoridades estadounidenses en mayo, pero sin embargo no se limitan a estas personas, precisó Credit Suisse.

Las autoridades estadounidenses y suizas están investigando varias instituciones financieras, entre ellas Credit Suisse, para determinar si han permitido el procesamiento de transacciones «sospechosas o altamente irregulares» o han obviado sus obligaciones concernientes a la legislación y reglamentación sobre el lavado de dinero.», detalló Credit Suisse, que indicó que «colaboraba con las autoridades».

Contactado para saber si era objeto de las mismas consultas, UBS, el primer banco del país, no hizo ningún comentario. UBS debe publicar sus resultados trimestrales el martes 3 de noviembre. De acuerdo a la ley suiza contra el lavado del dinero, los bancos están obligados a informar sobre las cuentas sospechosas.

En su acusación, la justicia estadounidense estima que unos 150 millones de dólares (132 millones de euros) en sobornos y retrocomisiones circularon por la instancia del fútbol mundial desde los años 90. En julio, la justicia suiza cifró en 81 los casos sospechosos de lavado de dinero reportados por los bancos en la investigación FIFA. A mediados de septiembre, el fiscal Michael Lauber indicó que se examinaron unas 121 cuentas sospechosas.