La transformación de Oblak
El portero esloveno de los 16 millones ha pasado de ser un considerado un fiasco a ser el héroe ante el Leverkusen y sumar 418 minutos invicto, una marca superior a la lograda por Moyá, al que cierra su regreso
colpisa
Miércoles, 8 de abril 2015, 20:09
Casi nueve meses después de lo esperado, Jan Oblak se está convirtiendo al fin en un puntal del Atlético. El meta esloveno llegó el pasado ... verano por exigencia del Cholo Simeone para suplir al belga Thibaut Courtois, tras pagar el club rojiblanco al Benfica nada menos que 16 millones de euros. Con sólo 21 años, se convertía en el guardameta más caro en la historia de la Liga española e ingresaba en el top ten de transferencias más costosas de cancerberos. Pero comenzó lesionado la pretemporada y tuvo que jugar Miguel Ángel Moyá, que cumplió con bastante acierto. Simeone, sin embargo, decidió brindar la titularidad al esloveno en la visita de la liguilla de Champions al Olympiacos de Míchel. Oblak no tuvo fortuna y quizá pudo hacer algo más en los tres goles. Parecía gafado hasta que Moyá se lesionó en los primeros compases del duelo de vuelta de octavos de final de la Liga de Campeones contra el Bayer Leverkusen, celebrado el 25 de febrero en el Vicente Calderón. Entró Oblak, decisivo a la postre al detener uno de los penaltis en la tanda que le dio al Atlético el billete para la siguiente ronda, donde le espera nada menos que el Real Madrid.
No es que haya tenido demasiado trabajo en los últimos partidos, pero el espigado portero balcánico ha mostrado grandes detalles y dejado su portería a cero en los tres últimos triunfos de su equipo ante el Getafe, Córdoba y Real Sociedad. Tampoco le marcaron los alemanes. Son ya 418 los minutos que acumula imbatido el joven arquero, una racha que mejora las dos más destacadas de su compañero y rival de portería, de 322 y 360 minutos cada una, en la presente campaña. Con Moyá apurando su recuperación, parece claro que Oblak le va a poner muy difícil la decisión a Simeone. El portero de la sonrisa permanente será titular el próximo sábado, en La Rosaleda, y apunta al once en el derbi madrileño a la europea del próximo martes.
Jan vivió algo similar en el Benfica, club en el que aterrizó con 16 años desde el Olimpia, y terminó jugando después de cuatro cesiones. Ha aprendido a relativizar, a enfadarse menos y trabajar más. Su actitud ha servido de ejemplo a otros. Guilherme Siqueira, discutido lateral zurdo del Atlético que ha perdido la titularidad en beneficio del diestro Jesús Gámez, habla de Oblak con argumentos. «Jan es un portero fenomenal, yo lo conozco del año pasado en el Benfica, donde estuve con él. Es un portero que nos puede dar mucho, como Miguel (Moyá). El tema de la portería lo tenemos solucionado porque hay dos grandes profesionales», explicó Siquera tras el choque del martes frente a la Real Sociedad, cerrado precisamente con una gran parada de Oblak, a golpe franco lanzado por Granero. Jan encandila ya a la afición colchonera, que a ritmo de rumba le canta aquello de «Obli, Oblak, cada día te quiero más».
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