Delegados de 17 países y la UE se reúnen para supervisar los avances del acelerador de Granada

En la reunión participarán representantes de 17 países más la Unión Europea a través de Euratom. España y Croacia forman parte de este proyecto como socios contribuyentes –soportan financieramente el acelerador con aportaciones en especie– y el resto –Alemania, Austria, Bélgica, Eslovaquia, Eslovenia, Finlandia, Francia, Hungría, Italia, Japón, Letonia, Lituania, Republica Checa, Rumanía y Ucrania– lo hacen como observadores.

Italia es el país miembro que más cerca está de dar el paso y anunciar su compromiso financiero con el acelerador de Escúzar: el pasado 2 de julio su ministra de Investigación, Anna Maria Bernini, firmó un memorándum de entendimiento (MoU) con el secretario de Estado de Ciencia, Innovación y Universidades español, Juan Cruz Cigudosa.

Días después, el director del consorcio IfmifDones España, Ángel Ibarra, expresaba su confianza en que Italia, e incluso algún otro país –hay negociaciones avanzadas con Alemania, Francia, Japón y la Unión Europea–, anunciase su intención de convertirse en socio contribuyente en la reunión semestral del comité del 16 de octubre.

Sin embargo, el portavoz del consorcio, José Aguilar, ha rebajado ahora estas expectativas, al asegurar que en el encuentro del miércoles no habrá altos cargos de ninguno de los países –tampoco España–, sino representantes técnicos de los distintos países. También matizó que, en todo caso, un anuncio de estas características le correspondería hacerlo al gobierno del Estado que tome la decisión, y no al consorcio español.

Según el responsable de la Oficina de Control del Programa será, pues, una reunión de trabajo, de perfil bajo, en la que se analizarán los avances del proyecto y, con bastante probabilidad, se realizará una visita a las instalaciones. En la Ciudad Industrial, Tecnológica y Área de Innovación (Citai) de Escúzar avanzan las obras de los tres primeros edificios del complejo –son 17 en total– en la parcela de 10.000 metros cuadrados donde se ubicará el acelerador, que se prevé esté terminado en 2034.

No obstante, Ibarra ya matizó en julio que el proyecto no necesita la participación financiera de todos los socios, porque el compromiso de España (95% hasta ahora) y Croacia (5%), junto al de «dos o tres países más» sería suficiente para llevarlo adelante.

El coste total de construcción del acelerador de Escúzar se calcula en unos 700 millones de euros que el Gobierno de España y la Junta de Andalucía se han comprometido a financiar al 50%. Hasta el momento se han movilizado unos 120 millones de euros –de ellos 32 en los edificios y prototipos que ya están en la Citai– y se prevé que el año que viene se licite y adjudique la obra del edificio principal por entre 250 y 350 millones de euros.

El director del consorcio también recordó que la contribución económica tiene lógicas contrapartidas para los socios: una, el desarrollo de su industria tecnológica a través de su contribución al proyecto; y dos, el derecho a hacer uso de las instalaciones de forma gratuita de cara a un futuro desarrollo industrial de la fusión como fuente de energía en su país. En cualquier caso, Ibarra consideró que el acuerdo firmado por Italia «rompió barreras» de cara al resto de observadores. «Sospecho que dentro de un año el panorama será totalmente diferente», aseguró.