Cuenca dice que el PP no está para «líneas rojas» e insiste en un pacto de ciudad

El dirigente hizo estas declaraciones en Canal Sur Televisión, donde fue entrevistado apenas 48 horas después de obtener los apoyos necesarios para convertirse en regidor de la ciudad. Sus palabras se entienden como una respuesta al pronunciamiento del presidente provincial de los populares, Francisco Rodríguez, que el jueves tendió la mano a los socialistas para evitar que los proyectos dependan «del voto de un político sin principios ni palabra», en referencia a Luis Salvador.

Cuenca lamentó que el ofrecimiento se haya realizado «con condiciones» y censuró a la formación que siga en la misma clave «que estos días pasados». El primer edil subrayó que es el momento de un «pacto de estabilidad» y recordó que existe la posibilidad de propiciar «nuevos presupuestos» y otras medidas que «están por encima de cualquier formación política». «Si quieren echar una mano», dijo, «que no pongan condicionantes porque si quiere entrar alguien de Ciudadanos y de Unidas Podemos, creo que sumamos mucho más».

El responsable aclaró que el jueves se produjeron los primeros contactos con las formaciones para definir la nueva estructura de gobierno. Confirmó que ni la confluencia ni los aún ediles naranjas pidieron entrar en el equipo, algo que sí que les ofrecerá el lunes, cuando está previsto que se sienten los portavoces en una reunión extraordinaria que tendrá lugar a las 13 horas en el Ayuntamiento.

El alcalde recordó que «todos tienen que mojarse» y volvió a insistir en el mismo argumento que en días pasados, cuando señaló que «quien no comprometa estos dos años con acuerdos y con lealtad tendrá que explicarlo».

En su opinión, que obtuviera los apoyos necesarios para recuperar la alcaldía forma parte del «sentido común» después de que la formación que representa fuera la más votada en las pasadas elecciones y, sobretodo, tras la crisis desatada en el Consistorio como consecuencia de la ruptura del bipartito. Como señaló, «o gobernaba la lista más votada, o se volvía a conformar un refrito de seis concejales del PP, que cambiaron tres veces de candidato entre ellos mismos».

Regreso

Al margen de las declaraciones del regidor, la de ayer fue una jornada de transición. El grupo municipal socialista aprovechó para seguir dando pasos en pos de la recuperación de la normalidad. El alcalde y sus asesores más cercanos iniciaron ayer la mudanza al lugar que ocuparán a partir de ahora y dedicaron la mañana a recomponer la agenda y entrevistarse con los responsables técnicos municipales.

El objetivo es conocer el estado exacto del Consistorio después de la crisis de las últimas semanas. La prioridad del nuevo gobierno es tener una imagen nítida del estado de las arcas municipales con idea de saber con exactitud cuál es el margen de actuación para afrontar la delicada situación que vive la ciudad.

Fuentes del nuevo gobierno confirmaron este viernes que la intención inmediata es recuperar la actividad en los barrios y normalizar la acción del Ayuntamiento en la ciudad. Se quiere relanzar al Consistorio en un momento que es clave para el futuro próximo de Granada.

El equipo de Cuenca trabajaba ayer en redefinir la agenda del alcalde, que se encontraba vacía, con la idea de retomar los lazos con los representantes sociales, económicos y laborales de la ciudad. Todo sin dejar de lado la definición del nuevo gobierno, que se espera que sea una realidad a comienzos de la semana que viene. Los socialistas tienen el «firme deseo» de que los órganos municipales vuelvan a la actividad y la prioridad es la junta de gobierno local, que se espera que sea convocada de nuevo «lo antes posible», preferentemente la semana próxima, con la idea de revertir la parálisis.